El inmortal Benny Moré, el Bárbaro del ritmo, la voz de oro de la música cubana de todos los tiempos, es recordado hoy en su natal Santa Isabel de las Lajas, localidad de la centrosureña provincia de Cienfuegos, con motivo del aniversario 52 de su fallecimiento.
Sus admiradores, que es igual a decir todo el pueblo de su “rincón querido”, como afirmó en una de sus melodías, peregrinarán a media mañana hasta su tumba, donde depositarán flores e interpretarán canciones de su autoría. Con ese homenaje comenzarán las actividades.
Posteriormente habrá un concierto de la Banda Municipal de Lajas en el parque central con números popularizados por el Benny.
También sonarán una vez más los tambores de Makuta, los mismos donde el bardo puso por primera vez sus manos cuando era muy pequeño en el Cabildo de los Congos, en una especie de premonición divina. El ritual, como de costumbre, le rendirá homenaje y estará cargado de cubanía.
El museo que lleva su nombre ha concebido un programa variado, dirigido fundamentalmente a la difusión de aspectos notables de su vida y obra y a la apreciación de múltiples objetos vinculados con él que se resguardan allí.
Para la tarde están previstas una parranda campesina especial con la presentación del grupo Mi rincón querido, formado por músicos lajeros, y un bailable en la plaza principal de la municipalidad.
Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez (Santa Isabel de las Lajas, 24 de agosto de 1919 -La Habana, 19 de febrero de 1963), o simplemente el Benny, estará hoy como ayer con sus coterráneos, su gente, los humildes que siempre quiso, los lajeros que lo admiran.