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Náyare Menoyo y Milene Medina, estudiantes de Periodismo
Es imposible hablar del panorama cinematográfico cubano sin reverenciar la obra de Estela y Ernesto Bravo, matrimonio unido no solo por el amor sino también por el mundo del documental. Muchos han sido sus trabajos, sin lugar a dudas, este binomio creativo ha logrado recoger momentos trascendentales en la historia de Cuba y de Latinoamérica toda.
Por estos días se conoció la noticia de que la Universidad de Nueva York donará a Casa de las Américas todas las obras inéditas de los creadores, así como archivos que contienen casi la totalidad de horas de filmación, que luego de un proceso de restauración, serán puestos a disposición de todo el público.
Visitar Casa de las Américas es siempre un desafío al conocimiento, una oportunidad para estar en contacto con nuestros artistas y creadores; esta vez no fue la excepción, solo que ahora logramos conversar con Arien González Crespo, directora de la Hemeroteca de Casa de las Américas, quien se refirió a los proyectos que se ha propuesto el centro sobre los materiales que se recibirán.
“Los originales de esos materiales de Estela y Ernesto los donaron a la Universidad de Nueva York, quienes debían digitalizar, a largo plazo, toda esa fuente documental, que estaba en formato de video obsoleto, antiguo. Después la realizadora solicitó a la universidad copias de preservaciones y llegó a un acuerdo con nosotros para donarnos toda esa documentación.
“Estamos muy contentos de que Estela haya pensado en nosotros; es particularmente importante porque ella es una fundadora de la Casa. Trabajó en sus primeros años, vinculado con sus primeras producciones como documentalista, en el departamento de Música de Casa… Con la creación del Centro de la Canción Protesta, ella fue la persona que organizó el primer encuentro en América Latina; además, se mantuvo muchos años en relaciones de trabajo con la propia institución.
“La cantidad de horas de estos archivos no se sabe hasta último momento, puesto que las cintas tienen problemas de conservación, no se pueden ejecutar hasta que no se limpien en un proceso de restauración. En total se enviaron a la Universidad de Nueva York mil 357 casetes, pero también esa es una cantidad aproximada. La Universidad de Nueva York decidió empezar por digitalizar todo el material relacionado con los dos documentales sobre el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz; son muchas grabaciones de valor.
“Lo que vamos a hacer con el archivo, con todas las copias digitales, es ponerlos al servicio del público, en las salas de lectura de la fundación. Se ubicarán en un servidor y así las personas podrán consultarlos a medida que estas estén disponibles”.
La pronta materialización de este proyecto es una oportunidad para que el público no especializado pueda acceder a la obra de la pareja, puesto que quien desea disfrutar de estos materiales ahora depende de la programación del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) o del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfico (Icaic), o en el peor de los casos a medios alternativos como los vendedores de disco o ‘el paquete’.
“Estela no nos ha podido dar a nosotros los documentales porque la Universidad de Nueva York todavía no se los ha dado a ella, es un proceso que demorará puesto que es una cantidad significativa de materiales”.
Entre los premios recibidos por los cineastas sobresalen Un Solo Mundo, en 1997, por el documental Los excluibles cubanos, y el Urban World Film Festival por Fidel: La historia no contada.
