Al camagüeyano Luis Orlando Antúnez, Bambino, director de la compañía teatral infantil La Andariega, le gusta tomar riesgos y hablar de cosas que otros temen decir. Y es que prefiere contar historias sobre tabúes que aún subsisten en la teatrología para niños.
Es por ello que apostó este año por la puesta en escena, durante los primeros fines de semana del año, de la obra A las tres … de una vez, creada a partir de textos de la investigadora y dramaturga Blanca Felipe Rivero, quien también inspiró el pasado estreno Jardín de estrella.
En Jardín…, dos pequeñas mostraron al público las grietas que dejan los divorcios de los padres o el abandono maternal, mientras que en A las tres… Bambino se adentra en un mundo un tanto oscuro.
Ahora dos actores, de unos ocho y 13 años, encarnan a Josué, un niño sobreprotegido que quiere encontrar la libertad fuera de casa y a Melissa, que intenta todo para estar lejos del padrastro quien la obliga a hacer unos “juegos” que a ella no le gustan.
Quizás para algunos sea una total locura hablar de abusos sexuales o de abandonos, pero lo cierto es que este espectáculo es un juego de sentimientos y verdades que enriquece, a niños y padres, para convertirlos en mejores personas.