Los educadores de todas partes son seres humanos especiales que laboran a favor del mejoramiento humano, a favor de la cultura; son personas admirables que tienen en hacer el bien la razón de ser de sus vidas, expresó la Ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, durante la jornada inaugural del Congreso Internacional Pedagogía 2015, en su décima cuarta edición.
Al acto de apertura en el capitalino teatro Karl Marx asistieron los miembros del Buró Político José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido; Miguel Díaz Canel Bermúdez, Primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, así como Esteban Lazo Hernández, vicepresidente del Consejo de Estado y Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Asimismo, estuvieron presentes José Ramón Fernández Álvarez, asesor del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros; Olga Lidia Tapia Iglesias, miembro del secretariado del Comité Central y jefa de departamento; Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), y otras personalidades nacionales y extranjeras, entre los cuales estaban representantes de Unicef, de la Unesco, de la Asociación de Educadores de América Latina y el Caribe, y de la Confederación de Educadores de América, así como ministros y viceministros de educación de diversos países.
En la conferencia inaugural La educación: retos y voluntad política, Ena Elsa hizo un llamado a luchar por un mundo de paz.
Paz, dijo, no significa solo ausencia de guerras, porque ¿qué noción de paz pueden tener los hambrientos o los condenados a la muerte por enfermedades que son curables?
Señaló que los educadores están en el deber de reflexionar con las nuevas generaciones sobre este tema y reconoció que la tarea no resulta fácil, pues “una mirada al mundo en que vivimos nos devuelve prácticas que forman parte del culto a la agresión, como las llamadas `guerras no convencionales`, los planes de desestabilización o destrucción de los Estados, la proliferación de grupos violentos y extremistas, el desgarramiento de las naciones, las culturas y las religiones con consecuencias imprevisibles.
“Estos tiempos retadores reclaman como nunca antes unidad entre nosotros los educadores; unidad a favor de los destinos de la niñez y la juventud; unidad con la convicción de que la educación es el instrumento más importante de que disponemos para enseñar a leer el mundo, para contribuir a su transformación y al crecimiento espiritual de los seres humanos”, enfatizó.
La titular hizo un breve recuento de las experiencias y los conocimientos acumulados por Cuba en los últimos años, y se refirió al proceso de perfeccionamiento de las formas de trabajo de las instituciones y de sus relaciones con la comunidad, de las concepciones curriculares y de los planes y programas de estudio, que permitan crear las condiciones para un salto cualitativo de la educación cubana.
En este sentido, hizo hincapié en la figura del maestro y en su preparación; piedra angular de todo el esfuerzo encaminado a elevar la calidad de la educación.
En este empeño, comentó, no habrá nada más importante que contar con educadores cultos, capacitados, creadores y, sobre todo, que formen desde su ejemplo.
Mencionó el orgullo de todos los cubanos por el regreso de los Cinco héroes antiterroristas que durante 16 años guardaron prisión en cárceles norteamericanas, y recalcó que ellos son frutos auténticos de la educación revolucionaria, de una escuela y una sociedad que forman en el patriotismo, la honradez, la solidaridad, el amor por su pueblo, por su familia y el sentido del deber.
Recordó que el próximo 28 de enero se cumplirán 162 años del nacimiento de José Martí, el cual será evocado en las diversas actividades del programa.
Pedagogía 2015 cuenta con la participación de alrededor de tres mil educadores, profesores, especialistas, estudiosos de la temática, de 30 naciones, y sus sesiones concluirán el próximo 30 de enero.