¿Cómo y cuándo Fidel, Líder Histórico de la Revolución, llamó la atención sobre las potencialidades turísticas de Las Tunas? ¿Cuándo comenzó a gestarse el embrión del Turismo en esta provincia? ¿Cuáles fueron las primeras instalaciones incorporadas a esa industria? ¿Quiénes fueron los protagonistas del inicio y su desarrollo? ¿Quiénes fueron los primeros directivos?..
Esas y otras interrogantes tienen respuesta fiel en las páginas de “Las Tunas y el turismo: síntesis histórica”, obra que demuestra cuánto puede hacerse en este y otros sectores para preservar la memoria, y dar respuesta a una convocatoria nacional a la que le faltan todavía oídos receptivos.
Porque, el XX Congreso de la CTC ratificó entre sus objetivos de trabajo sistematizar la historia y preservar el patrimonio histórico, como vía esencial para contribuir a reforzar el sentido de pertenencia de los colectivos laborales; y, consideró esencial en este propósito la participación de los trabajadores con más experiencias, principalmente de activistas jubilados, afiliados a las secciones sindicales en los centros de trabajo.
Y, “Las Tunas y el turismo: síntesis histórica”, es reflejo de cuánto se ha hecho en esta parte de la geografía cubana para contribuir a la consolidación de lo alcanzado y desarrollar nuevas ofertas; y, su lectura tiene el mérito de aproximarnos a la impronta dejada por la llamada industria sin humo en la historia de los tuneros, con argumentos que contribuyen a la identidad de sus protagonistas con el entorno laboral.
Ya no se podrá hablar más de este sector en la provincia sin referenciar este libro, todavía sin los favores de la imprenta, que traza pautas en el afán de guardar las memorias de esa cotidianidad que, en definitiva, se va convirtiendo en historia.
Su autor, José Ramón Campaña Tejeda (Chaparra, 1941), de fructífera y respetada trayectoria en el ramo, abrió las puertas de todas las instituciones que prestan servicios a clientes nacionales y extranjeros en esta zona del oriente cubano, y hurgó hasta en el más mínimo detalle de lo acontecido, desde los pasos fundacionales hasta fechas muy recientes.
No hay lenguaje rebuscado, no es la intención del investigador, quien de manera diáfana y asequible expone cronológicamente los hechos más significativos vinculados con el quehacer turístico en el territorio, proporcionando aderezo a la obra a través de mitos y leyendas que recrea utilizando elementos de la historia de las localidades donde están emplazadas las instalaciones.
Nada escapa al sagaz inquisidor, quien va caracterizando colectivos laborales, servicios, ofertas, empresas…