Veracruz.- La lucha cubana vivió este sábado actuación perfecta de cuatro coronas, con las cuales redondeó en una decena su amplia cosecha en los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe, que finalizan este domingo en varias ciudades de este estado mexicano.
Correspondió al estilo libre poner el broche dorado a la actuación de la isla, y para ello celebró triunfos inobjetables de Liván López (74 kg), Reineris Sala (86 kg), Javier Cortina (97 kg) y Eduardo Mesa (125 kg).
López, bronce olímpico de Londres 2012, ganó todos sus combates por superioridad técnica, frente al boricua Pedro Soto (10-0), el venezolano Cristian Sarcos (12-2) y el mexicano Christian Anguiano (10-0).
“Nunca debe menospreciarse una competencia, aquí se presentaron buenos gladiadores y muestra de ello es que en el segundo combate me descuidé y casi me cuesta la victoria. En el área hay rivales de consideración”, expresó el también medallista mundial apenas bajar del colchón.
El reinado de Reineris también navegó por cauces tranquilos, pese a las dificultades afrontadas para hacer el peso. En el debut aventajó 6-0 al nicaragüense Yader Cerda; en semifinales por 7-3 al puertorriqueño Jaime Espinal; y por el oro 4-0 al venezolano Pedro Ceballos.
“El duelo final no tuvo complicaciones, no quise arriesgar nada y solo conquistar el título. No me recuperé bien después de hacer el peso, pero cumplí mi compromiso de llevar la medalla de oro hacia Cuba”, expresó con evidente cansancio en el rostro el doble subcampeón universal.
Cortina, por su lado, inició fácil contra el dominicano Luis Pérez, a quien batió por 11-0, pero luego debió exigirse hasta el último segundo para eliminar al venezolano José Díaz, en pleito definido por la mínima (3-2). En la disputa del oro no tuvo contratiempos para apabullar 10-0 al azteca Jesse Ruiz.
“Fue una buena competencia, lo di todo sobre el colchón, pero el peso me impidió luchar con mayor intensidad”, opinó el campeón, antes de festejar la actuación rendida por su colectivo, en ese momento poseedor de tres títulos y una medalla de plata.
La guinda del pastel la colocó Mesa, con sonrisas en semifinal sobre el venezolano Luis Vivenes (9-0) y en la final frente al dominicano Josue Encarnación (3-0).
“Se me hizo complicada esta final, el rival es grequista y me sacaba 10 kilos de peso, así que basé mi estrategia en la pelea arriba, porque en el colchón podía superarme”, indicó el espirituano antes de apuntar que “este es el más importante triunfo de mi carrera deportiva”.
Los gladiadores cubanos habían festejado cinco coronas en el estilo clásico y una en el femenino. Tras su botín de 10 oros, tres platas y un bronce se ubicaron México (4-2-6) y Colombia (2-2-5).
Acerca del autor
Licenciado en Periodismo de la Universidad de La Habana (UH). Especialista en los deportes de boxeo, voleibol, lucha, pesas y otros. Cubrió los XV Juegos Panamericanos de Río-2007, los XXX Juegos Olímpicos de Londres 2012, la final de la Liga Mundial de Voleibol 2011 y otros eventos internacionales celebrados en Cuba. Profesor de Teoría en la Comunicación de la UH y la Universidad Agraria de La Habana. Imparte cursos de esta y otras materias en diversas instituciones del país como el Instituto Internacional de Periodismo José Martí. Ha obtenido premios y menciones en el Concurso Nacional de Periodismo Deportivo José González Barros.