I Rudens Tembrás Arcia, enviado especial
Veracruz.- La imposibilidad de viajar hasta la ciudad de Xalapa, el sábado último, nos privó de disfrutar en vivo las coronaciones de Laina Pérez y su equipo en la pistola 25 metros. El INFO de los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe nos ofreció tiro a tiro cada desenlace, pero sin dar cuenta de las tensiones y los sentimientos que seguramente reinaron en la Academia de la Policía El Lencero.
Ante tantas cifras sin olor a pólvora, la historia carecía de pasión y ritmo. Y tamaña distancia de por medio solo podía borrarse gracias a Internet. Entonces, el chat de la red social Facebook me “salvó la campana”. Tras varias horas de vigilancia, Laina apareció en una pequeña ventana dispuesta a responder cuanto yo deseara.
¿Cómo estás? Fue la frase rutinaria para romper el hielo, y la respuesta por fin añadió color a estas líneas: “Feliz de la vida, satisfecha por mis cuatro medallas”, en alusión además a la plata personal y el oro colectivo alcanzados en la pistola aire a 10 metros.
“Me hubiera gustado disparar más en la clasificatoria, pero tuve dificultades en la coordinación entre el cuadre de miras y el apriete disparador. Por fortuna mejoré en la reñida final contra la venezolana Maribel Pineda y me llevé el primer lugar”, escribió la matancera.
Sobre el evento por equipos chateó a continuación: “Mis compañeras Sheyla González y Claudia Hernández trabajaron muy bien, gracias a sus puntuaciones pude sumar otro título. Son muy jóvenes y era lógica cierta tensión, pero estábamos enfocadas y con muchas esperanzas de triunfo. Las tres llegamos a la final individual y Sheyla discutió el bronce hasta el último tiro. ¡Qué orgullo!”.
“Estamos contentas con los resultados y vamos a prepararnos mejor para los Panamericanos de Toronto 2015. Allí quiero entrar al podio y clasificar para los Juegos Olímpicos de Río 2016. Ya dejé escapar dos oportunidades (2008 y 2012) y la tercera tiene que ser la vencida. Ese es mi gran sueño ahora mismo”, tecleó sin parar.
¿Qué vino a tu mente tras cada victoria?, le devolví. Y tras unos segundos de espera me dejó a leer: “todo el esfuerzo realizado en estos meses, la familia y mi Cuba bella. El sábado la emoción casi no me dejó cantar el himno nacional”.
¿Qué significa aportar varios oros a la delegación?, le agregué como despedida, y tampoco faltó su mensaje: “Satisfacción, compromiso y plena confianza en que ganaremos los Juegos”.