Por René Camilo García Rivera
La Segunda Conferencia Internacional sobre Nutrición (CIN-2), a celebrarse entre los próximos 19 y 21 de noviembre en Roma, propondrá declarar la década 2016-2025 como “Decenio de Acción sobre la Nutrición”, según trascendió en documentos preliminares del cónclave.
“Recomendamos a la Asamblea General de las Naciones Unidas que refrende la Declaración de Roma (…) y que considere la posibilidad de declarar un Decenio de Acción sobre la Nutrición de 2016 a 2025 dentro de las estructuras existentes y los recursos disponibles”, anuncia el documento auspiciado por la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En la actualidad, más de 2 mil millones de personas en el mundo sufren deficiencias de micronutrientes (vitaminas y minerales), 805 millones padecen de hambre crónica y 1400 millones de sobrepeso. El perjuicio a la economía global como consecuencia del impacto humano de este problema se calcula en 3,5 billones de dólares anuales.
La CIN-2 reunirá en la capital italiana a ministros y representantes de organismos internacionales, cuyo objetivo será abordar los múltiples desafíos que representa la malnutrición para el desarrollo inclusivo y sostenible y trazar políticas eficientes para su enfrentamiento.
Entre las estrategias evaluadas sobresalen las oportunidades que ofrece la agricultura familiar como modo de producción de alimentos y su socialización.
“La agricultura familiar es el mejor aliado de la lucha contra el hambre, no sólo por su rol en la producción de alimentos, sino también por sus aportes al empleo rural y al desarrollo de los territorios”, señaló la semana pasada desde Brasilia Raúl Benítez, Representante Regional de la FAO, durante la I Reunión Ministerial Sobre Agricultura Familiar de la CELAC.
Los países latinoamericanos y del Caribe explotan un poco mejor las posibilidades que ofrece la agricultura familiar. Según estimaciones de la FAO, entre la mitad y el 70 % de los alimentos consumidos en la región provienen de esta. En Surinam, por ejemplo, se satisface de esa forma el 99 % de la demanda de alimentos. |René Camilo García Rivera, estudiante de Periodismo