Aunque no debía ser así, las complicaciones están motivadas porque habitan una vivienda vinculada de la Dirección Municipal de Educación (DME), que según ellos, se ha desentendido del mantenimiento al biplanta desde que fue entregado en el año 2000.
El motivo de la filtración es una avería en el vertedero del apartamento colindante, que ha provocado tanto daño, hasta el punto de podrir los marcos de las puertas en las habitaciones de la vivienda de Mireya y Mario.
En una visita reciente, la inversionista de la DME detectó el lugar de la rotura y diagnosticó que la solución sería un derretido de cemento, para el cual entregaron los materiales a los vecinos.
No obstante, ejecutarse lo dictaminado, el problema continúa, pues entre otras razones los trabajos no se hicieron con la calidad requerida y existe un salidero permanente por una llave defectuosa que agrava la situación, exponen los lectores.
Deseosos de resolver el problema acudieron a representantes municipales en la dirección de la Vivienda y el Consejo de la Administración, de donde los remitieron a la DME. La respuesta de estos últimos fue que no estaba en sus manos llevar a feliz término la queja, porque el apartamento de arriba pertenece a Educación Superior.
Y mientras ahorita casi les llueve bajo techo, vieron como única alternativa escribir a esta sección en busca de una respuesta satisfactoria.
Por nuestra parte, en próximos trabajos abordaremos el tema de las responsabilidades en el mantenimiento y reparación en edificios multifamiliares, un asunto para el que también existen reglamentaciones, pero alrededor del cual pululan la indolencia y hasta la falta de sentido común, porque al final todos salen perjudicados con el deterioro del inmueble.