Estados Unidos no tuvo piedad en la final del Mundial de Baloncesto y terminó por apabullar a Serbia con amplia diferencia de 129-92, con lo cual consiguió su quinta corona en estos eventos y revalidó el cetro obtenido en la cita de Turquía 2010.
Los estadounidenses llegaron al evento organizado por España con la nómina más joven que han congregado desde aquel mítico “Dream Team” que rediseñó las reglas del baloncesto en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92; pero ello no fue problema para los dirigidos por Mike Krzyzewski, quienes culminaron invictos y sacaron ventaja de más de 20 puntos en todos los choques celebrados desde el inicio del certamen.
El conjunto promedió 104.5 puntos en nueve partidos, con destaque ofensivo para James Hardem quien consiguió un balance de 14 cartones por cada encuentro (128 puntos en total). En tanto, Kenneth Faried se quedaba con 7.8 rebotes y Kyrie Irving servía 3.6 asistencias a los suyos en cada salida.
Una vez más los estadounidenses dieron muestra de la superioridad en este deporte, sin que precisaran aplicarse a fondo con una plantilla de lo que más vale y brilla de la NBA. Repletos de juventud y talento arribaron a la península ibérica y ahora se marchan de ella cargados de gloria.
En esta final los jugadores serbios, férreos herederos de la tradición yugoslava en este deporte, tuvieron un desempeño meritorio, aunque insuficiente para frenar la potente maquinaria desplegada por sus rivales, quienes terminaron por encajar un total de 15 triples y 30 canastas simples, a lo cual sumaron 24 encestes desde la línea de tiros libres.
Con este resultado, Estados Unidos empata con la desaparecida Yusgoslavia, país que acumuló cinco trofeos mundiales de baloncesto (1970, 1978, 1990, 1998 y 2002).
Algunos líderes individuales de este Campeonato Mundial fueron el puertorriqueño José Juan Barea (mejor promedio de anotados por encuentro, 22.0), el español Pau Gasol (máximo anotador con 140 puntos), el dominicano Francisco García promedió 3.6 triples en cinco choques y el filipino Andray Blatche se quedó con 69 rebotes.
Además, el también boricua David Huerta lanzó libres con una efectividad del 93.3%, Gasol recetó 19 bloqueos, el español Ricky Rubio robó 25 pelotas y el serbio Milos Teodosic completó 40 asistencias para los suyos.
En el tercer escaño ancló Francia, quien dominó a España en el cruce de octavos de final y terminó por batir a Lituania con ajustado marcador de 95-93.
