Desde septiembre de 2010, Silvio Rodríguez ha salido más de 50 veces al escenario de un barrio cualquiera de La Habana –y un poco más allá– a dar un concierto. La Corbata, Lugardita o El Fanguito son algunos de los lugares que han ganado la atención del cantautor cubano, y en muchos más sentidos que el musical.
Pero mientras avanzaban los conciertos, una idea maduró: ¿por qué no registrar lo que ocurría allí, y no solo lo referido a los conciertos de Silvio, sino esas otras realidades?
Así surgió, entonces, “Canción de barrio”, un documental de 80 minutos donde su realizador, Alejandro Ramírez, cuenta la esencia de dichos conciertos: por qué Silvio escogió esos barrios para llevarles su música.
Producido por los Estudios Ojalá y Producciones CANEK, el material contiene dos años exactos de conciertos –del 9 de septiembre de 2010 al 9 de septiembre de 2012– y se estrenará este jueves 28 de agosto en la Cinemateca de Cuba.
Luego de una muestra reducida para la prensa este martes, Ramírez comentaba a Trabajadores que “la reacción de la gente, el asombro primero y luego la esperanza al ver a Silvio, y la reiterada frase de «por fin se acuerdan de nosotros» se repetía en cada lugar; pero la riqueza del documental está en las causas que generaron estos conciertos por los barrios”.
La pobreza, los problemas sociales, las dificultades con el agua y la vivienda, la marginación, y hasta la poca esperanza en el futuro –si continúan sus vidas como hasta ese momento– son algunos de los problemas que refleja el documental, mientras las canciones de Silvio Rodríguez y sus conciertos sirven de hilo conductor.
Al respecto, Mónica Rivero, periodista y parte también del equipo de realización, considera que “no se suponía que al cabo de tantos años, una parte de la sociedad cubana quedara rezagada en el acceso a la cultura” y otras muchas cosas, por lo que los conciertos y el documental se vuelcan sobre esas otras historias y realidades que conviven bajo el mismo cielo de La Habana.
Y en el documental, puede notarse bien lograda la intención de develar estos mundos que tantas veces son obviados. La gente vuelca sobre la cámara sus verdades, sus vidas, y no hay nada ni “feo” ni “bonito”, sino tal cual es: real.
Alejandro Ramírez y su equipo, logran contar en poco menos de una hora y media un universo lleno de dificultades, riesgos y limitaciones, a la vez que develan una Cuba que, aunque no lo note, tiene las canciones de Silvio Rodríguez muy incrustadas en su identidad.
Asimismo, en cada imagen mostrada de los conciertos, puede verse la sensibilidad de los cubanos ante la cultura, sin importar formación o gustos, cuando Frank Fernández, Los Papines u Omara Portuondo son disfrutados, por los vecinos, cada cual según su arte.
Cuando la premier de “Canción de barrio” sea un hecho este jueves, el documental comenzará a recorrer un camino que, según sus realizadores, ojalá pueda llegar a cada una de las comunidades de las que salieron las historias y, en algún momento, a la televisión nacional.
[youtube url=»http://youtu.be/IpM0s6s6exs» width=»740″ height=»520″][/spoiler][/spoiler] Canción de barrio: Silvio Rodríguez en dos años de gira interminable (trailers).[/youtube]