En los primeros 40 años de la justa los mexicanos impusieron su ley con ocho triunfos, un par como locales en 1926 y 1954, y el resto en calidad de visitantes en San Salvador 1935, Panamá ´38, Guatemala ´50, Caracas ´59, Kingston ´62 y San Juan ´66. En ese lapso los atletas de nuestro archipiélago apenas pudieron reinar en La Habana 1930 y muy cerradamente en Barranquilla ´46.
Luego, fruto de la política de la Revolución en el campo deportivo, sobrevino un soliloquio cubano que duró cerca de 30 años, marcado por títulos, preseas y récords a montones en casi todas las disciplinas, y por exorbitantes ventajas en los medalleros finales.
Las inobjetables victorias en Panamá 1970, Santo Domingo ´74, Medellín ´78, La Habana ´82, Santiago de los Caballeros ´86, México ´90, Ponce ´93 y Maracaibo ´98 firmaron la seguidilla más larga en la historia del evento (8), pusieron fin al dominio azteca y lanzaron prácticamente al olvido la porfía entre ambos países.
México no volvería a imponerse hasta el siglo XXI, ayudado por nuestras ausencias a las citas de San Salvador 2002 y Mayagüez ´10, debido a falta de seguridad y trato desigual, respectivamente. También mostró poderío en Cartagena de Indias ´06, ocasión en que mantuvo en jaque a la delegación caribeña hasta las jornadas decisivas del certamen que celebró el 80 aniversario de los Juegos.
En la actualidad, Cuba acumula 11 lideratos por 10 México, de manera que en Veracruz podría certificarse un empate histórico o ampliarse un tilín la ventaja de los antillanos. Eso, sin desconocer los avances de Venezuela, comitiva a tomar en cuenta por sus logros en la última década y por lo visto hace cuatro años en Puerto Rico, cuando escoltaron a los líderes a solo 11 títulos: 127 por 116.
Se sabe que la Mayor de las Antillas encabeza el medallero global centrocaribeño con mil 629 oros, 823 platas y 614 bronces (3 mil 66 en total). Y que los hijos de la tierra del tequila se ubican seguidamente con terna de mil 120- mil 109- 976 (3 mil 205). Sin embargo, es poco conocido que los “mariachis” liderean en 19 deportes por 15 sus enconados adversarios, otra evidencia y razón para una rivalidad que renace.
La fiesta de Veracruz promete una pugna intensa entre ambas potencias regionales. Los anfitriones lidiarán con apoyo total del público, con una delegación superior a los 700 atletas y en todas las disciplinas convocadas. Cuba llevará más de 500 representantes, pero no intervendrá en poco más de cien pruebas. Solo la eficiencia competitiva conducirá al ansiado gallardete. Ya comentaremos…
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