En conferencia de prensa en esta capital, el diplomático aseveró que trágica situación en Gaza no es una confrontación ni una guerra declarada entre dos partes, sino un exterminio masivo de las fuerzas de Tel Aviv contra los árabes porque estos carecen de aviones, tanques y morteros y lo único que ponen son los muertos de su indefensa población.
Akram hizo un recuento del incumplimiento de las autoridades de Tel Aviv del acuerdo alcanzado en julio del 2013, a solicitud de Estados Unidos, de establecer una tregua de 9 meses, que posibilitará el 30 de abril del 2014 lograr un acuerdo completo y total y abrir cauce a una solución justa al conflicto árabe-palestino, lo cual hizo fradar de nuevo las negociaciones bilaterales.
No es un secreto, dijo, que el gobierno estadounidense autorizó más de 600 millones de dólares para respaldar la agresión israelí contra Palestina, lo que corrobora que el Gobierno de Washington es su más el aliado en la región.
Los verdaderos objetivos de Israel de la matanza que lleva a cabo en la Franja de Gaza, que además mantiene bloqueada por aire, mar y tierra, es impedir la constitución de una gobierno de unidad y reconciliación nacional, previsto en el acuerdo suscrito entre el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) y la organización Al Fatah, integrante de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), apoderarse de todo el territorio y mantener su oposición a la constitución de un Estado Palestino independiente.
Al resumir las demandas palestinas, Samhan señaló un urgente cese del fuego; el levantamiento del bloqueo aéreo, marítimo y terrestre, a la Franja de Gaza, volver a la reconstrucción de ese territorio devastado durante 8 años y buscar la forma internacional que permita proteger al pueblo palestino, de estas agresiones..
Sobre la solidaridad recibida por la comunidad internacional y sus organizaciones, indico que significa un apreciable apoyo al pueblo palestino,, pero que mundo árabe no ha hecho nada en concreto por evitar ese genocidio.
Seguidamente agradeció los esfuerzos de Cuba en su respaldo al cese inmediato de la agresión israelí y en el reclamo permanente por una solución justa y sin imposiciones a la causa palestina, y las muestras de solidaridad que muchos cubanos le hacen llegar personalmente en repudio
