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La empresa estatal en el centro de la Industria Alimentaria

Foto: José Raúl Rodríguez Robleda.
Foto: José Raúl Rodríguez Robleda.

Un llamado a capacitar a los hombres para enfrentar los cambios estructurales que se experimentan en el actual Ministerio de la Industria Alimentaria, hizo Ulises Rosales del Toro, miembro del Buró Político y vicepresidente del Consejo de Ministros, al intervenir en los debates de la Comisión Agroalimentaria, que en su segunda sesión de trabajo analizó la capacidad de la industria de conservas.

“Uno de los esfuerzos que deben hacer ustedes, los diputados, es lograr que las empresas jueguen el papel que les han asignado”, después del proceso de perfeccionamiento de este ministerio, en el cual se separan las funciones estatales y empresariales, recomendó.

Entre los señalamientos realizados a la actividad por los diputados que integran esta comisión se encuentran ocho que están catalogados como subjetivos, es decir, dependen de la capacidad de los hombres para resolverlos, y hacia ellos llamó la atención el vicepresidente del Consejo de Ministros.

El informe de la comisión precisa que no hay problemas con el procesamiento de los frutales, pero sí con el tomate, ya que en esta campaña faltó materia prima para completar los planes. Hay limitaciones con los transportes refrigerados para el traslado de la leche a la industria y de las producciones elaboradas hasta los puntos de venta a la población.

Las industrias locales, asegura el documento, necesitan mayor vínculo con el Ministerio de la Industria Alimentaria para asegurar la entrada de los insumos contratados, las estrategias para la adquisición de tecnologías, mejora de las condiciones de trabajo y que se logre mitigar los efectos negativos que ponen en peligro esas producciones.

También asegura que en diferentes industrias del país existen problemas con el tratamiento de los residuales, lo cual atenta contra las buenas prácticas de producción y del medio ambiente.

Varios diputados plantearon sus inquietudes con el cumplimiento de los planes de producción, el tratamiento de los residuales, y la falta de capacidad de las industrias para procesar todas las producciones en los momentos picos de cosecha.

Sobre este último aspecto el diputado Boris Rodríguez, por el municipio de La Sierpe, en Sancti Spíritus, enumeró los inconvenientes que ha tenido este municipio para que la industria de la provincia recepcione las 500 toneladas de guayaba que se producen en esa zona del sur, donde quedan reservas productivas, por lo que propuso la instalación de una minindustria para aprovechar el volumen del territorio.

Elbis Pérez, diputado por el municipio de Bolivia, en Ciego de Ávila, habló de la necesidad de mejorar las condiciones tecnológicas de la industria conservera de Majagua, en el municipio de igual nombre, que tiene una alta cultura de producción y el respaldo de una zona altamente productora de tomate.

Reseñó las dificultades que enfrentaron los agricultores para cumplir el plan de producción de tomate, dadas las intensas lluvias que afectaron los cultivos; no obstante, se hicieron resiembras oportunas y sobrecumplieron el plan del año, al entregar 31 mil 500 toneladas del vegetal.

María del Carmen Concepción, ministra de la Industria Alimentaria, explicó a los miembros de la comisión los cambios estructurales que ha tenido este organismo de la Administración Central del Estado, desde el año 2009 hasta la fecha, con la unificación de dos ministerios y una sensible reducción de las estructuras.

Dijo que actualmente laboran en el sector 20 mil trabajadores menos que hace cinco años atrás, y que en su funcionamiento se separan las funciones estatales y empresariales, lo que refuerza el papel de las empresa estatal socialista y consolida procesos productivos.

La comisión también analizó la marcha del plan de acción para el enfrentamiento a las manifestaciones de indisciplinas sociales, ilegalidades y corrupción, así como cuestiones referentes a su vida interna.

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