Atletismo cubano en el 2014: ¿Lejos o cerca del mundo?

El bien llamado deporte rey es quizás una de las pocas disciplinas con un calendario competitivo internacional imparable. Desde que finalizara el campeonato mundial bajo techo en Sopot, Polonia, el 9 de marzo, casi todas las semanas se celebran mítines atléticos, sean de la Liga de Diamante u otros por invitación.

Cuba, segunda potencia de América y entre las 10 imprescindibles del mundo —si lo medimos a partir de las medallas obtenidas en citas del orbe— vive hoy un desafío difícil en el nuevo escenario, con pocas figuras estables en sus rendimientos, vacíos en eventos tradicionales, atletas estelares ausentes y una hornada de jóvenes talentosos, pero sin el roce internacional mínimo, por las razones económicas conocidas.

Intentemos entonces analizar lo hecho desde el séptimo lugar en la ciudad polaca hasta lo sucedido este fin de semana en Puerto España, Trinidad y Tobago. Más allá de los 14 títulos alcanzados y las 38 preseas, vayamos a lo cualitativo, escondido muchas veces en números y que significan también insuficiencias del trabajo.

Nuestra subcampeona olímpica y oro universal en Sopot, la pertiguista Yarisley Silva, sin discusión, es la figura más sobresaliente del período y del atletismo nacional desde hace par de años. De ahí que sus tres doradas y seis preseas sean una cosecha elogiosa, máximo si tenemos en cuenta que las ha conseguido en lides de notable calidad, frente a las rivales de más nivel. Su primer escaño hoy en la Liga de Diamante responde a eso.

La escuela de triple salto ha puesto la otra carga distintiva con un trío de coronas y ocho podios, lidereados por la veterana Mabel Gay, en tanto Ernesto Revé y Lázaro Martínez comienzan a rendir lo que de ellos se espera con los mejores registros de sus jóvenes carreras logrados este propio 2014. La penosa sanción por indisciplina del submonarca mundial Pedro Pablo Pichardo ha limitado un botín mayor, pero la solidez de esta área es clara y clave, sobre todo entre los hombres.

Fuera de estas especialidades —con marcas punteras para la temporada en el mundo—, se aprecian vientos favorables en los 800 metros con Sahily Diago, quien rompió un añejo récord de Ana Fidelia Quirot en el Barrientos in Memoriam y luego entró segunda en la cuarta parada de la Liga de Diamante; así como en los 110 con vallas con Yordan L. O’Farrill, que suma el quinto registro mundial de estos seis primeros meses (13.19).

Muy provechosas han sido para los velocistas (100, 200 y 400) las confrontaciones atléticas en Trinidad y Tobago, adonde no han acudido las grandes estrellas, pero sí muchas caribeñas, entre las que surgirán, de seguro, los sucesores de Usain Bolt y compañía. Sin embargo, todavía hay lagunas en los cronos, a pesar de los triunfos obtenidos.

En las especialidades de campo, la nota más feliz la aporta Denia Caballero en disco, octava en el ranking mundial con sus 64,89 en la quinta parada de la Liga de Diamante, es decir, entre jerarcas. Por supuesto, se extraña a Yarelis Barrios (período de maternidad), a las temibles jabalinistas (llegamos a tener un trío de nivel mundial), y hasta la carismática martillista, Yipsi Moreno, doble subtitular olímpica y triple campeona universal, de quien nos informaron que pudiera regresar con vistas a los Juegos Centrocaribes de Veracruz.

No quisiera olvidar en este repaso al decatlonista Yordanis García, con la alta responsabilidad de mantener lo conseguido por su compañero Leonel Suárez (lesionado por este 2014). Su única presencia internacional en Gotzis le reservó 8299 puntos, una cifra no alcanzada por él en la arena internacional desde hace un lustro.

Este panorama sintético muestra que si bien se trabaja y se buscan alternativas para insertar a nuestros atletas en eventos de mayor envergadura (estamos a solo días de participar en el mundial juvenil y quedan paradas de la Liga de Diamante), el atletismo cubano vive uno de sus momentos más bajos en cuanto a premios y figuras de talla universal, al tiempo que el propósito de ganar entre 19 y 22 títulos en Veracruz puede conseguirse, pero será bien peleado y no debe significar vanagloria, sino un reto hacia el futuro.

Cuba en gira internacional (abril- junio 2014)

Estadísticas: Joel García

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