Por: Alain Mira López, estudiante de Periodismo
Brasil ya inauguró la gran fiesta, la Copa del Mundo de Fútbol del 2014 comenzó y la selección local abrió dándole el primer alegrón a sus fanáticos al vencer a su similar de Croacia, tres goles por uno, este jueves, en Sao Paulo.
La primera parte del partido inició con unos pésimos 11 minutos para los locales, quienes durante ese tiempo apenas pudieron sobrepasar la media cancha en contadas ocasiones, tener mayor posesión el balón.
Del otro lado del terreno, los croatas, lidereados por los centrocampistas Luka Modric e Ivan Rakitic, supieron aprovechar bien los deslices de sus contrarios y a la altura del minuto 11 el defensa brasileño Marcelo envió, de forma accidental, el balón al fondo del arco custodiado por Julio César.
Al parecer, esto fue el detonante para los pentacampeones, pues, a partir de ese momento, el equipo se transformó y comenzaron a jugar fútbol a un nivel superior.
Tanta presión sobre los europeos dio sus frutos y 18 minutos después del autogol, un pase filtrado por el centro de Oscar, le dio el espacio al delantero Neymar para perforar la puerta de Stipe Pletikosa.
El desempate llegó en el 71, cuando Fred aprovechó un agarre de de Dejan Lovren dentro del área y se lanzó al suelo demostrando su calidad como actor. El árbitro principal, el japonés Yuichi Nishimura, quedó encantado con ella, pues rápidamente pintó al croata de amarillo y declaró el penal.
Neymar fue el encargado de patear la esférica al fondo de la red y no defraudó. Este gol lo convirtió, con 22 años y 123 días, en el jugador más joven en anotar dos veces en un mismo partido y en el primer jugador en romper una marca en el Mundial de Brasil 2014.
Pero una diana de diferencia no fue suficiente para los cariocas y en el descuento cayó el tercero fabricado por el centrocampista del Chelsea, Oscar, para sellar el partido.
Primera victoria para la verdeamarella que, si bien no se mostró con la potencia de juego esperada, sigue siendo el gran favorito para ganar la copa por la condición de sede y la calidad de sus jugadores.
Aplausos para los croatas quienes jugaron un buen partido, fabricaron buenas contraofensivas y fueron mejores que los locales en las jugadas de balón parado, pese a no conseguir ninguna anotación por ellos mismos.