De nuevo a la mar, dijeron los miembros de cinco tripulaciones de la Empresa Pesquera e Industrial (Epicien) de la provincia de Cienfuegos al conocer la noticia de que retornarían el Golfo de Ana María, al sur del territorio de Ciego de Ávila, donde realizan sus faenas.
Esos abnegados trabajadores cumplieron el plan de captura de camarón al completar 323 toneladas (t), destinadas a la exportación, pero el país requiere, para completar el compromiso establecido, de unas 30 t más adicionales.
En las labores intervienen también dos enviadas (así llaman a los barcos destinados a la transportación del crustáceo hasta la industria en tierra y de los suministros para los pescadores y los equipos).
Yoán Alberto Castellano López, director general de la entidad, explicó que el retorno al mar se hizo debido a una solicitud del Grupo Empresarial de la Industria Alimentaria al cual pertenece Epicien, avalado, además, por los resultados de la prospección sobre la presencia del crustáceo en la zona de captura.
Los pescadores cienfuegueros enfrentan también la denominada corrida de la biajaiba (pez de unos 30 centímetros de longitud, con la aleta dorsal y las pectorales de color rojo claro y la cola ahorquillada y rojiza).
No obstante, los resultados están por debajo aún de las necesidades de la economía del país.