Aunque su tabloncillo clama porque sea pintado, hay alegría en la sala techada Giraldo Córdova Cardín, de la capital provincial en Ciego de Ávila, centro de entrenamiento de los búfalos avileños, multicampeones en Cuba de la Liga Superior de Baloncesto (LSB).
Recientemente entrenó y fue constituido allí el equipo cubano femenino, categoría sub-15 (escolar), que representará a la isla en el Centrobásquet, con sede en México en junio del presente año.
Moisés Bravo Torres, entrenador local de ese deporte, afirma que “la instalación nos ha ayudado a conquistar varios lauros: El título de la LSB por ocho años consecutivos; oro en la categoría escolar, en uno y otro sexo, en el 2013; y en abril pasado obtuvo primer lugar el juvenil masculino y bronce el femenino.
“Los obreros de mantenimiento hacen un gran esfuerzo día a día para conservar el centro. Sin embargo, cuando llueve caen goteras y se suspenden las actividades por el deterioro del techo”, afirma Moisés.
Para Lino Cabrera Estrada, administrador de la sala, las dificultades mayores están relacionadas con el detrimento de las persianas metálicas y el sistema hidrosanitario. Dijo que hay un presupuesto aprobado para ejecutar el mejoramiento de estos y otros componentes, cuyo programa está en la etapa de confección de los proyectos.
“A veces nos quedamos a oscuras por fallos internos de electricidad, otro problema es el audio que está roto”, argumenta Moisés Alexis García, director de la instalación.
“La herrumbre ha picado estructuras metálicas, los baños tienen una situación crítica, por lo que el financiamiento asignado será para resolver los casos más apremiantes, no dará para remodelar un centro grande como este, el cual no solo funciona hoy como academia de baloncesto, sirve también de sede de campeonatos provinciales y nacionales”.
Cerca de la Cardín, en la Avenida de los Deportes, unas 52 columnas de hormigón recuerdan la pasada intención de levantar una gran polivalente. Hoy el lugar tiene una historia distinta, pero además una solución salvadora, según el criterio de Jorge Sosa Ferrer, comisionado provincial de voleibol en Ciego de Ávila.
“Dentro de las gigantescas estructuras de concreto creció la hierba sin límites”, rememora Jorge y argumenta que “felizmente en el 2004 se convirtió el área en el centro provincial de voleibol de playa, desde entonces y hasta el 2012, fue escenario para el entrenamiento del equipo nacional juvenil, y gracias a su existencia, el año pasado los conjuntos avileños se convirtieron en titulares nacionales en todas las categorías”.