Hacer todo lo humanamente posible para que Gerardo, Antonio y Ramón regresen a la Patria lo más pronto posible y poner fin al caso de los Cinco fue el llamado que hizo este viernes Fernando González Llort, Héroe de la República de Cuba, durante el VII Encuentro Internacional Justicia y Derecho, en su tercera y última sesión de trabajo.
A punto de concluir el evento, y como parte del panel Las antípodas de la justicia y el derecho, Fernando agradeció a los juristas cubanos la defensa del caso y recordó las condiciones de aislamiento a las que estuvieron sometidos, las cuales dificultaron el proceso de la defensa.
Dijo que tuvieron que enfrentar todo eso “desde una celdita, de unos cuantos metros, aislados, 24 horas encerrados, disponiendo de un pedacito de lápiz para escribir”, y a lo cual habría que sumar el trabajo engorroso de los abogados, cuyas visitas se realizaban en un tiempo limitado y a través de un cristal.
El aislamiento no fue solo el efecto sobre la psiquis del detenido y las limitaciones en cuanto a elementos vitales para la vida —agregó— sino la imposibilidad de prepararnos para la defensa en el proceso judicial al que se nos sometió.
El espacio de homenaje a los Cinco contó con la presencia de Ricardo Alarcón de Quesada, asesor del Presidente Raúl Castro en el caso de los Cinco, también abogado y experto del caso, quien comentó un documento presentado por la Fiscalía General de los Estados Unidos, en mayo del 2001, donde se le solicita a la jueza modificar las instrucciones que había preparado para los miembros del jurado.
Alarcón, como en otras ocasiones lo ha hecho, manifestó su deseo de que este texto circule por el mundo, y expresó que no recordaba otro particular en que los fiscales retiraron la acusación inicial, a fin de cambiar el posible veredicto, para el cual no contaban con ningún recurso probatorio.
Por otra parte, Graciela Ramírez, coordinadora del Comité Internacional para la Liberación de los Cinco, señaló que en todos estos años se ha vivido una experiencia amarguísima con la justicia norteamericana, y convocó a los delegados al encuentro a participar en la tercera jornada 5 días por los Cinco, la cual tendrá lugar en la capital de Estados Unidos, Washington DC, del 4 al 11 de junio venidero.
“Se ha demostrado la inocencia de estos hombres pero también la impunidad más brutal”, sentenció Graciela.
Mostró preocupación extrema por el caso, porque en casi 16 años “no hemos visto en la justicia norteamericana el menor atisbo de corregir esta barbaridad”.
En otro momento de su intervención, precisó la necesidad de trabajar con suma urgencia, pedir apoyo, solicitar esfuerzos de la solidaridad internacional para llevar tal reclamo al epicentro de lo que en Washington DC ocurrirá.
De igual manera, pidió pidió a Estados Unidos que abandone su política fracasada de hostilidad y genocidio contra el pueblo cubano, y “en eso Obama tiene las prerrogativas que le confiere la Constitución, pero lo que necesitamos es que se logre y se haga”.
En el panel estuvieron presentes, además, Adriana Pérez y Elizabeth Palmeiro, esposas de Gerardo Hernández y Ramón Labañino, respectivamente.
Palmeiro comentó que muchas veces le hizo la pregunta a su esposo de cuánto duraría la separación, y hoy comprende que, mientras no cese la hostilidad, la labor de los Cinco es cada día más importante.
El doctor Rubén Remigio Ferro, presidente del Tribunal Supremo Popular, presenció los debates del panel, en cuyo inicio se presentó el documental Juicio a los Cinco: Violaciones de los derechos humanos, de factura venezolana.
