Los mejores aceros del mundo volverán a cruzarse en la capital cubana a partir del próximo 22 de mayo, cuando regresen la Copa del Mundo de Florete (M) Villa de La Habana y el Grand Prix de Espada (F) a su sede habitual en el área expositiva de Pabexpo.
Durante cinco días el sitio albergará las dos competencias internacionales de mayor reconocimiento en la escena deportiva cubana, las cuales agrupan a los principales exponente del ranking mundial en sus respectivas categorías.
Aunque los trámites de pago de inscripción comenzarán desde el día 21 de mayo en horas de la tarde en Pabexpo, no será hasta el 22 cuando salgan las primeras competidoras en la espada, quienes dirimirán una primera etapa para luego disputar la eliminación directa.
El día de más agitación será el viernes 23 de mayo, cuando coincidirán las acciones finales del Grand Prix de Espada con los poules eliminatorios de los floretistas en su camino a integrar la tabla preliminar de 64 tiradores.
En esta ocasión se han inscrito 118 espadistas de 29 naciones, entre las que sobresale la actual campeona de la lid y líder del ranking mundial, la rumana Ana Branza, quien tendrá de nuevo como rivales a la húngara Emese Szasz, y la rusa Tatyana Andryushina, medallistas de plata y bronce en 2013, respectivamente. Los países visitantes más representados serán Rusia, Estados Unidos de América, Venezuela y Alemania, con ocho participantes per cápita.
Mientras, para el florete han confirmado su participación un total de 132 tiradores de 24 países, con destaque para Estados Unidos de América, Venezuela e Italia, que inscribieron un total de 12 competiros cada uno. Entre los hombres repiten también los ocupantes del podio de la pasada edición habanera: Race Imboden (USA, oro), Giorgio Avola (ITA, plata) y Alexey Khovanskiy (RUS, bronce).
Para el certamen de florete por equipos, que tendrá lugar el domingo 25 de mayo, una vez finalizado el duelo individual en esta arma, han confirmado su presencia los equipos que se adueñaron de las medallas en 2013; a saber: Rusia (oro), Estados Unidos de América (plata) e Italia (bronce). En el torneo colectivo se inscribieron un total de 18 planteles.
En el caso cubano, los esgrimistas del patio estarán representados en todas ambas especialidades con diez competidores, quienes tendrán la oportunidad de medirse con los mejores exponentes de mundo en estas armas, posibilidad que viene a palear una deuda perenne en la preparación de los antillanos, quienes pocas veces pueden asistir a eventos de este nivel.
Villa de la Habana = Calidad
Para tener una idea de la importancia de ambos torneos basta mencionar que la cita cubana asisten la mayoría de los líderes del ranking en ambas armas, con lo cual queda asegurado el nivel competitivo del máximo evento de la esgrima en Cuba.
Entre las damas, únicamente faltarán cinco espadistas de las ubicadas en las primeras 30 plazas del listado del orbe (4, 6, 12, 20 y 21); grupo encabezado por las ya mencionadas Branza, Szasz y la china Anqi Xu, tercera del mundo.
En tanto, los floretistas no cuentan con la presencia del actual líder del ranking, el chino Jianfei Ma, pero estarán aquí los ubicados del 2 al 11 en dicho listado; con los cuales se suman 20 de los mejores 30 del planeta, entre ellos los estadounidenses Imboden y Gerek Meinhardt, segundo y tercero respectivamente.
Mientras, para el evento por equipos entre los varones asisten los primeros cinco conjuntos del ranking, según información aportada por la metodóloga nacional Mercedes del Risco, quien añadió que “debido a la calidad del certamen es una excelente posibilidad para los equipos nacionales, los cuales tienen como principal meta la participación en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en noviembre próximo”.
Entre las principales representantes del patio estarán la santiaguera Yamirka Rodríguez, ubicada en el puesto 2018 del mundo y bronce en los Juegos Pan Guadalajara 2011; la matancera Yoslaine Cardenal, número 76 del mundo en la espada. Mientras, entre los hombres destacan los habaneros Yosniel Álvarez y Jesús Riaño, campeón y subcampeón nacional, respectivamente; así como el camagüeyano Michel Carty.
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