La Agencia de Información Nacional (AIN) cumplirá 40 años el próximo miércoles. Se dice fácil y rápido, pero cuatro décadas significan mucho trabajo, sobre todo si se tiene en cuenta que una agencia no se detiene en ningún momento: labora los 365 días del año, las 24 horas del día.
Los tiempos han cambiado, obviamente. Al principio la misión de la AIN era proveer de información nacional e internacional a los medios provinciales y municipales, y al mismo tiempo, llevar a las redacciones de los medios nacionales lo que acontecía en todas las provincias del país.
Esa sigue siendo la prestación principal de la agencia (anualmente se difunden más de 20 mil informaciones), pero la era del teletipo ha quedado atrás. Internet y las nuevas tecnologías han cambiado las reglas del juego y en ese escenario la AIN puede competir diversificando sus productos y servicios.
De hecho, además del cast informativo, se ofrece a los clientes servicios especiales (reportajes, artículos, comentarios, entrevistas, crónicas, garantizando la exclusividad de las propuestas), compendios informativos para la radio, un banco de fotografías que cubre todo el país, audiovisuales periodísticos, publicidad, centro de documentación y acreditaciones para la prensa cubana.
Uno de los más populares espacios es el canal de teletexto Señal ACN, pensado para que los colaboradores cubanos en el exterior accedan a los contenidos de los periódicos nacionales y a un compendio de las principales informaciones del día. En Cuba, los usuarios de la televisión digital pueden acceder también a ese servicio por las madrugadas.
La ventana en la web de la agencia es el portal ACN (Agencia Cubana de Noticias, www.ain.cu), recientemente rediseñado, que difunde materiales en español, inglés, francés y ruso.
“Hubo un tiempo en que las agencias estaban a la vanguardia de la inmediatez, pero ahora cualquiera puede transmitir al momento información sobre cualquier acontecimiento, las nuevas tecnologías lo permiten —afirma Edda Diz Garcés, directora de la AIN—; nos toca trabajar más en ese sentido, y hacerlo con más profundidad, intencionalidad, pertinencia, calidad en los materiales.
“Contamos con un buen equipo de profesionales, en muchas de las corresponsalías hay ahora periodistas jóvenes muy talentosos. De hecho, la edad promedio de nuestros trabajadores es de 45 años: tenemos la frescura y el ímpetu de la juventud, y la experiencia y las enseñanzas de los más maduros.
“Hay mucho por hacer, tenemos muchas metas: ampliar los servicios, explorar potencialidades; tenemos el anhelo de sacar a la luz un medio impreso. Vamos a celebrar el cumpleaños con el compromiso de seguir siendo un medio de referencia en la prensa cubana”.
