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Cuba y Sudáfrica celebraron este viernes en La Habana los 20 años de relaciones diplomáticas y de la caída del régimen racista en la llamada Nación Arcoiris conocido como apartheid, hecho donde resultó decisivo el aporte de este país. Durante el acto político-cultural en la sede de la Cancillería, el viceministro primero de Relaciones Exteriores, Marcelino Medina, recordó que el establecimiento de los vínculos diplomáticos con Cuba fue el primer acto de política exterior del gobierno dirigido por el gran líder antiapartheid sudafricano, Nelson Mandela.
Tal hecho ocurrió el 11 de mayo de 1994, en el contexto de la visita a Sudáfrica del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, para asistir a la toma de posesión de Mandela.
Medina hizo un recorrido histórico por los lazos de hermandad entre ambos pueblos, evidenciados desde la década de 1960 con el apoyo de la isla a los luchadores africanos que combatían al oprobioso régimen de segregación racial.
En ese sentido, resaltó la contribución de «más de 300 mil cubanos que acompañaron a los heroicos combatientes africanos para expulsar a los racistas de Angola y forzar con acciones combativas el cese de la opresión racista en Namibia y Sudáfrica».
Destacó el desarrollo ininterrumpido desde 1995 de la colaboración bilateral y consideró que «Cuba y Sudáfrica han vivido dos décadas de excelentes relaciones diplomáticas y comparten una tradición de lucha común, así como las aspiraciones a construir un mundo mejor con igualdad y justicia social».
Además, agradeció la solidaridad y apoyo de Sudáfrica, evidenciado en el rechazo de ese país al largo bloqueo económico financiero y comercial norteamericano contra Cuba y el respaldo a la lucha por la libertad de los antiterroristas cubanos presos en Estados Unidos desde 1998 por prevenir acciones violentas contra la Isla.
Por su parte, el embajador sudafricano en Cuba, Naphtal Manana, manifestó que su país concede «gran importancia a la amistad y cooperación existentes con la isla, que tienen un impacto positivo en nuestras relaciones a nivel bilateral y multilateral».
Al respecto, expresó su compromiso de «trabajar para fortalecer nuestros lazos aún más como alianza estratégica y tener relaciones más sólidas, cordiales y duraderas entre ambos países, así como crecientes vínculos económicos, sociales y políticos».
También, agradeció al Gobierno y pueblo cubanos «por su inquebrantable solidaridad y amistad de muchas décadas», expresada en el papel jugado por la Isla en el derrumbe del régimen segregacionista sudafricano.
Al acto, por la parte cubana asistieron el vicepresidente José Ramón Machado Ventura, el presidente del Parlamento, Esteban Lazo, y el canciller, Bruno Rodríguez, entre otros funcionarios del Gobierno.
(Tomada de Prensa Latina)
