La Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (Anir) es parte de la economía, subrayó enfáticamente uno de los delegados a la conferencia correspondiente al municipio de Cienfuegos.
Y argumentó que todas las soluciones que se aportan influyen en los procesos de producción o de servicios o por lo tanto, tienen implicaciones económicas.
En un debate que pudo ser más objetivo, los asistentes prestaron atención especial a la no aplicación de la Ley 38 que establece la remuneración financiera a los innovadores y racionalizadores por los aportes que realicen, siempre que las administraciones tengan conciencia de la importancia y necesidad de esa estimulación y tengan el personal capacitado para ello, como es debido.
“Sin el apoyo de las direcciones de los centros laborales poco puede lograrse”, aseguró otra delegada.
Tairí Pérez, vicepresidenta de la Anir, al intervenir, señaló que los resultados que exhibe hoy la provincia de Cienfuegos demuestran que se ha disminuido notablemente en la eficacia del funcionamiento y que persiste la desmotivación. Expresó que el número de afiliados ha decrecido en un 50 % y la labor dejó de tener la efectividad y el impacto de años anteriores.
Subrayó que debe buscarse un punto de partida para mejorar la organización y captar más asociados.
Otros asistentes se refirieron a la importancia de establecer la gestión de innovación a nivel empresarial, con la unidad de todos los factores, al igual que determinar una adecuada estrategia de comunicación y realizar eventos de diversos tipos que llamen la atención de los trabajadores, técnicos y especialistas, sobre todo de los jóvenes.
Mediante el voto directo y secreto se eligió el nuevo buró ejecutivo de la Anir en el municipio de Cienfuegos, el cual quedó presidido por Odalys Medina Ramos.
Con esa conferencia finaliza el proceso de balance a ese nivel en el territorio cienfueguero.
En las intervenciones los delegados expresaron las dificultades principales y las proyecciones. Foto: Ramón Barreras