Siguen las movidas estratégicas previas al tope Cuba vs. Rusia en las semifinales de la IV Serie Mundial de Boxeo de la AIBA. Apenas llegó a Moscú el quinteto caribeño dirigido por Rolando Acebal, los rusos introdujeron un par de variaciones que afincan su favoritismo para vencer en la confrontación de ida, prevista para el jueves 24 de abril.
La selección local ha llevado a la banca a los campeones europeos Aleksei Egorov (91 kg) y Armen Zakaryan (64), y colocado en sus lugares al crucero plateado mundial Evgeniy Tishenko y al ligero welter Maxim Dadashev, submonarca del orbe juvenil en la edición de Guadalajara 2008.
De esta manera, los rusos inclinan a su favor las valoraciones de los especialistas y aficionados, pues al menos tres de sus hombres poseen más aval que los cubanos inscritos.
Me refiero al pluma Vladimir Nikitin, plateado universal; el mediano Artem Chebotared, tercero a ese nivel; y ahora Tischenko. Sus rivales serán los debutantes Norlan Yera (56) y Arlen López (75), y el crucero Erislandi Savón, quien acumula seis victorias en la campaña, pero todavía se debe un gran triunfo como adulto en lides universales y olímpicas. Pudiera ser este su primer gran momento.
El doble submonarca mundial Yasnier Toledo (64) y el bronce a ese nivel Yosbany Veitía (49) deben salir airosos frente a Belik Galanov y Dadashev, respectivamente, pero en pleitos muy complejos que pudieran inclinarse a los locales, debido a su calidad, al apoyo de su afición y hasta de los jueces, quienes siempre suelen ser más «caritativos» con los anfitriones. Recuerdese que en la historia de estas lides casi siempre ganan las franquicias que acogen las series.
Los Domadores de Cuba necesitan salir de Moscú con al menos dos victorias, para buscar un empate o hasta la victoria en las cinco peleas reglamentarias del tope de regreso, previsto en La Habana el 2 de mayo. En ese trance los rusos tienen evidente ventaja en las divisiones de 52 y +91 kg, en tanto ceden en 60, 69 y 81 kg.
Ya veremos qué trae esta fiesta de los puños, pero ciertamente se antoja dificil para nuestra selección.
