Un ron cubano de 150 años de envejecimiento constituyó la novedad de cata en la reunión de expertos gastronómicos y turísticos nombrada Bayamanaco o Balcón del Habano, con el fin de examinar bebidas y su nexo con los habanos, los puros Premium mejor cotizados en el mundo.
La cita se celebra desde el 2007 en el Hotel Presidente de la capital cubana, y este fin de semana la novedad la aportó una cata insólita de un ron premiado en Estados Unidos en el siglo XIX y cuya matriz la conserva aún la ronera de la oriental ciudad cubana de Santiago de Cuba.
El especialista de mercado de la compañía Havana Club International S.A., Yunior Antonio Alcolea Godines, significó que se trata de la primera destilación de un licor extra seco de Bacardí, creado en 1862.
“Con esa muestra, reseñó, Facundo Bacardí Massó ―fundador de esas bodegas― logró el primer lugar en un festival internacional de espirituosos, celebrado en Búfalo, Estados Unidos, en 1874.
El entendido dijo que tal aguardiente, pese a su envejecimiento de 150 años aún mantiene frescura, aroma y delicadeza. “Tal mezcla fue añejada en barriles de roble, pero abandonaron su producción pues creaba demasiado sedimento para poder embotellarla, dado que en esa época no existía la tecnología apropiada para ello”, indicó.
Los catadores del Balcón del Habano que probaron esa rareza la calificaron de suprema calidad, ligereza y suavidad, pese a su tiempo de conservación, y verificaron el poder de los alcoholes contenidos en esa mezcla, extraídos de las mieles de caña.