Uno de los grandes retos que tienen los trabajadores de la salud es demostrar la factibilidad de la segunda etapa del proceso de reordenamiento del sistema que vive Cuba, lo cual debe estar respaldado con el protagonismo de cada colectivo laboral, enfatizó Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la CTC, al intervenir en el Pleno del Comité Nacional del Sindicato de este sector.
El también miembro del Comité Central del Partido exhortó a conceptualizar el cambio que requiere el movimiento sindical en estos momentos de transformaciones; tenemos que dejar de hacer análisis generalizados, y pasar de las valoraciones cuantitativas a las cualitativas.
Agregó que lo hecho hasta hoy en la salud pública todavía no logra la satisfacción del paciente en cuanto al servicio y la calidad con que este se brinda, aunque reconoció avances en las actividades médicas y hospitalarias, así como del proceso inversionista en un país que destina altas cifras del presupuesto estatal a los gastos corrientes de este sistema.
Dijo que se debe valorar cuánto más se puede hacer optimizando los recursos financieros y materiales, y que la calidad debe ser una exigencia de los colectivos, dado el impacto que las reparaciones y remodelaciones de los centros tienen en el mejoramiento de las condiciones de trabajo y de cada actividad médica.
Precisó que los avances en materia de salud pueden ser reflejos de la aplicación del método clínico y terapéutico, de la medicina preventiva, de los principios fundacionales del médico de la familia y del mayor uso de la medicina natural y tradicional; que no se deben ver solo vinculados al diagnóstico de un equipo de alta tecnología.
Comentó que hay muchas razones para que el sindicato encabece la batalla por optimizar la movilización de los trabajadores hacia la eficiencia que tanto necesitamos en ese sector, y como resultado de todos sus logros abrirán el desfile por el Primero de Mayo, en la Plaza de la Revolución, de La Habana.
El secretario general de la CTC, indicó mejorar la asamblea de afiliados y lograr que los cuadros administrativos lleven a ella los datos e informaciones más claras posibles, porque esos son los elementos para combatir, para convencer. “El sindicato es la asamblea y la sindicalización no puede ser impuesta, es consciente y voluntaria”.
El informe presentado por la MsC María Isabel Martínez, quien se desempeñó como secretaria general del Sindicato de la Salud hasta este pleno, traduce la satisfacción y compromiso de los trabajadores por el reconocimiento que tiene el sector y el respaldo a las transformaciones, así como la implementación de los acuerdos de su X Congreso.
Las intervenciones de los miembros del Comité nacional reflejaron la satisfacción de los colectivos por las nuevas políticas aprobadas para el sector, que como explicó el doctor Luis Navarro, viceministro de Salud, sobrepasan el incremento salarial y ahondan en la atención integral a los trabajadores para que estos puedan lograr servicios de calidad.
Plantearon algunas preocupaciones de los afiliados, a muchas de las cuales se dio respuesta en la reunión, así como a problemas que subsisten en el funcionamiento de las estructuras de base y la falta de completamiento de los cuadros en las intermedias.
En una intervención medular, el doctor Roberto Morales Ojeda, ministro de Salud Pública, explicó las transformaciones en el sector, que se encaminan a continuar mejorando los indicadores de salud de la población; elevar la calidad de los servicios y la satisfacción del pueblo y hacer eficiente y sostenible el sistema.
Además se refrió a las prioridades que tienen para este 2014, entre las que se encuentran el fortalecimiento de los servicios, así como la higiene, epidemiología y la microbiología, porque “si logramos cambiar los estilos de vida mejoraremos los indicadores de salud”.
Los miembros del Comité nacional aprobaron la liberación de María Isabel Martínez, quien se desempeñaba como secretaria general del Sindicato de la Salud y pasará a ocupar otras responsabilidades, y eligieron al doctor Santiago Badia González, para ocupar esa responsabilidad.
