Foto: René Pérez Massola
“Partiendo del pensamiento que preside a este congreso, La cultura es lo primero que hay que salvar; y del hecho real de que la arquitectura ha sido secuestrada por la construcción, es necesario que tomemos el acuerdo de ¨rescatar¨ a esa arquitectura secuestrada y que a través de la Uneac, organización que concentra a la vanguardia artística nacional, se haga valer de una vez y por todas, el verdadero contenido que representa la arquitectura para la cultura y el desarrollo de nuestro país”.
Esta afirmación fue hecha por el arquitecto Augusto Rivero Mas, Profesor Consultante del ISA y Profesor Auxiliar de la Universidad de San Gerónimo, poco después de concluir ayer los debates de la Comisión Número 3 Ciudad, Arquitectura y Patrimonio, durante la primera jornada del VIII Congreso de la Uneac, cuya clausura se efectuará este sábado en el Palacio de las Convenciones de La Habana.
Según Rivero, la arquitectura “es un tipo de lenguaje especial que, debido al imprescindible vínculo social que establece con los seres humanos a través de su uso, constituye un amplio e importante campo de significaciones; es un sistema complejo de relaciones compuesto por una serie de factores entre los que se deben priorizar sus valores sociales, tecnológicos, funcionales, expresivos, estéticos y simbólicos, sin lo cual no es posible realizar una evaluación objetiva de su actividad; tiene que estar en consonancia con los intereses de la sociedad en la cual se desenvuelve y satisface sus necesidades; ser desarrollada en dependencia de los recursos técnicos y económicos existentes; estar vinculada con la correcta solución de los requerimientos para los cuales se concibió y en respuesta a los elementos culturales propios de la sociedad en que se erige y, por consecuencia, con los elementos ideológicos que la caracterizan y sustentan.
“Como arte —agregó—, la arquitectura comunica valores simbólicos y expresivos, más posee una utilidad funcional con lo cual responde a las necesidades propias de los sujetos a los que va dirigida o a los requerimientos de los diversos objetos a los cuales debe dar respuestas. Por ello a diferencia de las otras artes visuales, el factor valorativo de su inversión es mucho mayor que en la pintura y la escultura a cuyas expresiones no pocas veces ennoblece al enmarcarlas o servirles de soporte”.
El también crítico y curador de arte afirmó que histórica y tradicionalmente “la historia del arte y la cultura se ha investigado y explicado a través de la evolución y el desarrollo de la arquitectura y el urbanismo de cada cultura y su época, considerándose que cada conglomerado urbano es el exponente más significativo de la cultura local”.