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El Aula Magna de la Universidad de La Habana fue escenario este jueves del acto por el Día del arquitecto cubano, donde se entregó el Premio Vida y Obra 2014 de la especialidad, como parte de las actividades por el 13 de Marzo.
Esta fecha quedó establecida por el Colegio de Arquitectos de La Habana hace 79 años, para homenajear a los trabajadores del sector, pero la efeméride adquirió connotación política en 1957, al coincidir con el asalto al Palacio Presidencial y a la toma de la emisora Radio Reloj, acciones simultáneas realizadas por un grupo de jóvenes revolucionarios cubanos, lidereados por el estudiante de Arquitectura José Antonio Echeverría.
En esta ocasión, la más alta distinción que concede la Unión Nacional de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción de Cuba (UNAICC) fue otorgada por unanimidad del jurado a Leonardo Montalván Cabrera, para quien la noticia inesperada resultó más impactante que la felicitación que el venidero 24 de agosto recibirá de familiares y amigos cuando cumpla 90 años de edad.
Su selección provino de tres precandidatos y todos con los requisitos establecidos por la UNAICC para entregar el Premio Vida y Obra: tener alto nivel de consagración a su profesión y relevantes resultados en la ejecución de proyectos tanto a pie de obra como en la dirección, la investigación y la docencia.
Montalván cuenta 44 años de profesional de la construcción y 70 en el sector, y aunque jubilado, se mantiene activo y brindando su experiencia, vasta en el tema de la vivienda, pues se ha dedicado a al estudio y construcción de diversas tecnologías.
Alegre por el mérito recibido, se complace prestar asesoría técnica en la reparación capital del hospital docente general Calixto García, ubicado en la barriada capitalina de El Vedado, uno de los incluidos en el programa de rehabilitación de centros de la salud pública.
