Los debates entre funcionarios del INDER y los delegados de ese sector cubrieron una gama amplia de preocupaciones, emanadas del proceso orgánico del Congreso a todos los niveles. En términos deportivos podríamos afirmar que el “juego se fue a extrainning”.
Las incongruencias e insatisfacciones en materia salarial fueron de las más reiteradas por los participantes, así como las dificultades materiales que afectan el proceso formativo desde los combinados deportivos hasta la instancia provincial. La necesidad de ampliar y perfeccionar las opciones de superación científica para entrenadores y directivos fue señalada también con igual énfasis.
Un momento especial de las discusiones, presididas por Roberto León Richards, Vicepresidente primero del INDER, fue el dedicado a la formación ética y moral de docentes y atletas. En este sentido se ratificó la importancia de forjar sentimientos de agradecimiento a la Revolución, y de profundizar en valores como la honestidad y la fidelidad. También se hizo un llamado al rescate general de la disciplina en todos los escenarios del deporte cubano.
El encuentro fue propicio además para ofrecer evidencia sobre las actuales fórmulas de subversión ideológica que el gobierno de Estados Unidos implementa contra el sistema deportivo del país.
Cada interrogante recibió la respuesta esperada o la posible en este instante, pero sobre todo el compromiso de atenderlas de forma integral en la medida de las posibilidades.
