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Un niño como Chala

Por: Adriana B. Rosa Peralta, estudiante de Periodismo

Conducta pretende retratar la historia de la educación en Cuba. Foto: Eddy Martin Díaz.

“Ernesto Daranas logró entregarle al público una película que es ya un acontecimiento”, afirmó Joel del Río, periodista y crítico de arte, quien condujo  la conferencia de prensa ofrecida ayer en el Centro Cultural ICAIC: Fresa y chocolate; con motivo del estreno, hoy, 6 de febrero, del filme cubano Conducta. La lluvia  de preguntas y respuestas estuvo protagonizada por  el staff y  parte del elenco de actores del filme.

El también director de Los dioses rotos, Los últimos gaiteros de La Habana y el telefilme ¿La vida en rosa?, cuenta esta vez, en 100 minutos, la historia de Chala interpretado por Armando Valdés Freire, un niño de 11 años que vive con su madre drogadicta (Yuliet Cruz). El infante, un talento descubierto casi accidentalmente por Mariela López, directora del casting, encarna a un muchacho habanero que  encuentra  cariño y respeto en Carmela (Alina Rodríguez) su veterana maestra.

 Conducta, intenta recrear aspectos relacionados con  la educación en Cuba. Según Daranas, también guionista, la cinta muestra una imagen no común de La Habana Vieja; es decir rompe el prototipo de solares y azoteas. Predominando los primeros y medios planos la mayor parte del trabajo de filmación se realizó cámara en mano, comentó Alejandro Pérez, director de fotografía.

La entrega filmográfica se alimenta de hechos reales; Carmela existe. Es un material hecho con niños, pero no dirigido a ellos. Busca ahondar  en los adultos  reflexiones cardinales como la responsabilidad, la educación, los modales, los sentimientos.

Conferencia de Prensa con motivo de la presentación de la película cubana «Conducta». Foto: Eddy Martin Díaz.
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