Por Alaín Mira López, estudiante de Periodismo
Tras años de ausencia vuelve el ciclismo a nuestras carreteras. Y no podía ser mejor la idea, pues este 2014 se cumplen 50 años de la primera Vuelta a Cuba, de ahí que la Clásica Camagüey-Habana levante expectativas y prometa nuevas emociones desde el sábado 15 de febrero hasta el 22 del propio mes, cuando concluya frente al Capitolio habanero.
La competencia constará de ocho etapas, entre las cuales se han fijado un premio de montaña (Topes de Collantes), 16 metas volantes y una prueba contrarreloj (Morón a Ciego de Ávila).
Los tramos Ciego-Sancti Spíritus, Santa Clara-Cárdenas y Varadero-La Habana contarán con la mayor cantidad de sprints intermedios, tres cada uno. Estarán ubicados en Jatibonico, la capital espirituana y Cabaiguán en el primero caso; Santo Domingo, Colón y Jovellanos en el segundo; y Peñas Altas, Santa Cruz del Norte y Vía Blanca (frente al Concesionario Peugeot) en el tercero.
El resto de las pruebas de velocidad tendrán lugar en el circuito previsto dentro de la ciudad de Camagüey; en las localidades de Florida, Gaspar y en Trinidad; también en el Prado cienfueguero, en Cumanayagua y 200 metros luego de Manicaragua.
Esta vez todos los integrantes de la selección nacional competirán por sextetas de provincias y el reto estará en ver si el mejor rutero de los últimos años y bicampeón de las Vueltas a Cuba, Arnold Alcolea, puede dominar desde la formación de La Habana.
