Hace 55 años, el 3 de febrero de 1959, un hecho sacude a la combativa región de Guantánamo, que tantos hijos gloriosos aportó durante todas las gestas libertarias para el logro de la definitiva independencia, ese día se produce la primera visita del Comandante en Jefe del Ejército Rebelde Fidel Castro Ruz, y el encuentro directo del líder de la Revolución con el pueblo del Alto Oriente cubano.
Desde su arribo al antiguo aeropuerto de Los Caños, a varios kilómetros de la ciudad, y durante todo el trayecto hasta el céntrico parque José martí donde se realiza el recibimiento oficial, es recibido entre vítores, exclamaciones y aplausos, por una multitud de grandes y chicos, todos quieren ver, saludar y oír al Comandante barbudo que bajó de la Sierra Maestra para traer un futuro de esperanzas al pueblo.
Luego, en el mismo lugar donde nació la Villa de Santa Catalina de Guantánamo en 1870, frente a la escuela de Comercio (hoy politécnico de economía Capitán Asdrúbal López) ante un mar de pueblo que desde temprano espera ansioso por escucharlo, Fidel habla de las ya visibles contradicciones con el país vecino del Norte que no acepta la realidad de una Revolución triunfante, a solo 90 millas de sus costas.
En su trascendental intervención el Comandante en Jefe afirma que “Estamos dispuestos a todos los sacrificios para defender la independencia y la libertad”, al tiempo que señala las puertas y ventanas cerradas del edificio que ocupa la Guantánamo Sugar Company y reafirma que la Revolución nunca recibirá ordenes de ningún gobierno y anuncia el derrumbe de la dictadura del hambre, la miseria, la ignorancia y el analfabetismo.
El aniversario 55 de esta histórica visita será recordada, hoy, por las nuevas generaciones de guantanameros con una velada político-cultural.