“Esta es la primera vez que se realizará esta expedición sin la presencia de mi padre, quien llegó por última vez a Salto Fino en 1996, explicó a la prensa Iliana Núñez Velis, hija del reconocido geógrafo y espeleólogo y presidenta de la Fundación Antonio Núñez Jiménez de la Naturaleza y el Hombre”.
En unión con miembros de la Fundación participan en la expedición investigadores guantanameros de la unidad presupuestada de servicios ambientales Alejandro de Humboldt (UPSAAH), del sistema nacional de áreas protegidas, del instituto de geografía tropical, así como miembros del cuerpo de guardabosques y un equipo de filmación de la productora Mundo Latino.
Los expedicionarios tienen como objetivo realizar estudios de zoología e hidrología, así como de las tradiciones orales y la población de esta bella y casi virgen zona natural del extremo oriente cubano, de gran valor ecológico.
Divididos en diferentes grupos los especialistas recorrerán los parajes de Quibijan, Boca del Naranjo, Mal Nombre, Los Lirios, La Melba, Boca de Jaguaní, Alto de Iberia y visitarán la catarata de Salto Fino, en estas zonas se concentran las mayores reservas de biodiversidad del Caribe Insular.
Ángel Graña González, antiguo colaborador del Doctor Núñez Jiménez y actual vicepresidente de la Fundación califica de “muy significativa la reedición de estas expediciones, que tuvo su inicio en el año 1945, y contribuyeron a dar a conocer los valores naturales de este bello e inhóspito territorio”.
Ubicada en la zona de Arroyo El Infierno, Salto Fino (305 metros) es la caída de agua de mayor altura de toda la región del Caribe. Este lugar fue avistado por Antonio Núñez Jiménez, desde un helicóptero en 1966, y 30 años después (1996) llegaría por primera vez por tierra.
