Tomado del blog Universo Beisbol, Por Reynaldo Cruz
El lanzador yace en el suelo, encima de la lomita, y se lleva las manos a la cabeza en pleno dolor. Los jugadores del infield lo rodean, no de tan cerca, mientras los médicos lo atienden, y una camilla se acerca para transportarlo. El terror inunda los rostros de ambos equipos, incluso hay quienes ni se atreven a mirar. Esta escena ha tenido lugar en la Major League Baseball doce veces en los últimos seis años, cuando pitchers han sido golpeados en la cabeza por líneas salidas de los bates de sus rivales (llamadas come-backers), lo que ha llevado a la máxima dirección del béisbol norteamericano a aprobar gorras (o gorros) protectores para ellos, que serán opcionales y estarán disponibles este año a partir de los entrenamientos de primavera (spring training).
De acuerdo con varios reportes, incluido el publicado por Tim Polzer en SIWire:
“Dan Halem, vicepresidente ejecutivo de la MLB para relaciones laborales, dijo que las pruebas de la liga de numerosos prototipos de diferentes vendedores de gorros acolchonados y su posterior aprobación vino después de una consulta con la asociación de jugadores (sindicato).”
Entre los casos de lanzadores golpeados por los batazos, el más notable de los últimos tiempos es tal vez el de Brandon McCarthy, quien fue golpeado en la cabeza por una línea cuando lanzaba por los Oakland Athletics 17 meses antes de la decisión (tomada este martes 28 de enero), y necesitó cirugía por lesiones cerebrales que amenazaban su vida.
Recientemente, Alex Cobb, de los Tampa Bay Rays fue golpeado por una línea de Eric Hosmer, de los Kansas City Royals, y quedó tendido en el suelo, mientras todos los jugadores de ambos equipos miraban horrorizados, e incluso algunos mostraban lágrimas en los ojos. Hosmer fue uno de los primeros en visitar a Cobb en el hospital.
“La compañía declara que las gorras son un poco más de media pulgada más ancha en el frente y una pulgada más ancha en los costados —cerca de la sien— que las gorras estándares, y brindan protección para locaciones de impacto frontal contra líneas de hasta 90 millas por hora y para locaciones de impacto lateral ante hasta 85 millas por hora. El suave acolchonado, dice isoBlox, está hecho de “polímeros moldeados de inyección de plástico, combinados con substrato de espuma” y está diseñado para difundir la energía ente el impacto a través de una combinación de técnicas de dispersión y absorción.”
En cuanto a la estética, no todos los modelos lucen igual de geniales, pero lo importante es que los lanzadores sean protegidos, no solo en cuanto a su integridad deportiva, sino también en cuanto a su propia vida.
