La Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (Usaid) mostró un programa subversivo de seis millones de dólares contra Cuba al usar por error una línea desprotegida para enviar documentos a diplomáticos norteamericanos en La Habana.
Los materiales detallan que dicha entidad lanzó el pasado 10 de julio su iniciativa SOL-OAA-13-000110 y al menos 20 organizaciones no gubernamentales solicitaron los fondos para entrenar a presuntos disidentes de la nación caribeña en los próximos tres años.
Ese plan incluye propuestas de presupuesto, formas de observar y evaluar el progreso, organigramas y experiencia de otros proyectos desestabilizadores diseñados para Cuba bajo la ley Helms-Burton de 1996.
Tiene como objetivo brindar oportunidades a los llamados opositores para que viajen al exterior, aprendan habilidades técnicas y se adiestren en una “serie de campos considerados importantes para el desarrollo de la democracia y la sociedad civil”, en abierta subversión del orden político.
Según reportes periodísticos, funcionarios de la Usaid llamaron a los aspirantes a fines de agosto para informales de que sus solicitudes habían sido enviadas en una línea no codificada a La Habana y podían descartarlas si las consideraban demasiado arriesgadas.
Ninguno de los grupos anuló sus peticiones, pero al cabo de varias semanas cada uno recibió cartas de rechazo que no hacían mención del error de la Agencia pero que calificaban a sus iniciativas de deficientes.
La Usaid se autodefine como una organización no gubernamental, aunque es uno de los instrumentos de la Casa Blanca que utiliza los servicios de inteligencia para obtener información sobre países de la región e influir en su política interna y externa.
Tiene un presupuesto anual de mil millones de dólares y los destina a operaciones en Latinoamérica y el Caribe con el fin de “moldear” las sociedades donde trabaja e identificar las personas adecuadas que sirvan a sus planes.
Entre sus principales tareas está reforzar la política exterior estadounidense bajo la fachada de la ayuda económica, agrícola, sanitaria, política y humanitaria.
(Con información de Prensa Latina)