Aunque ya se sabe que el permiso o licencia para que asista la representación cubana —el campeón Villa Clara— está solicitado hace varias semanas al Departamento de Estado de Estados Unidos, esta telenovela se enreda por días, con temas que ni siquiera estaban ahora en mente de los directivos de la CBC.
Oscar Prieto Párraga, presidente de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, que tendrá a su cargo la organización del clásico venidero, señaló en conferencia de prensa: “Si Cuba no viene, la Serie del Caribe podría morir en Margarita. Cuba es el salvavidas de la Serie”.
Tanto el ejecutivo venezolano como el titular de la CBC, Juan Francisco Puello, andan esperanzados que en diciembre esté ya la aprobación del gobierno estadounidense con respecto a Cuba, tal y como sucede para los Clásicos Mundiales, pero esta última condicionante los ha sorprendido, aunque Panamá, Colombia y Nicaragua han reaccionado con alegría, pues entre ellos debe salir ese posible candidato.
Es esta otra leña más al fuego de un debate que postergó además el Acuerdo Invernal, aprobado hace un par de semanas, pero que solo será sellado en febrero del 2014, según aseguró Puello. En detrimento de la autonomía de la CBC, la MLB restriega listas de fatiga, autoridad de aprobación y muchos millones de dólares.
Y es precisamente un aumento de las ganancias lo único que hace pensar en ese sexto equipo, aunque nunca debieron asociarlo con la entrada de Cuba, pues es un perfecto chantaje sin disfraz.
Noticias de la Antillana
Aunque la Copa Antillana de Acero amplió su escenario este año al estadio Santiago Changa Mederos, lo más valioso sigue siendo la posibilidad de sumar partidos pretemporadas para al menos seis conjuntos que estarán en la 53 Serie Nacional. Industriales con el trío Gourriel como mayor atractivo; Cienfuegos peleando a pesar de ausencias notables y Santiago de Cuba con casi todos sus estelares, excepto Alexei Bell, han sacado el mejor provecho.
Es bueno aclarar, ante las constantes preguntas y llamadas a nuestra redacción, que la baja de Irait Chirino en la nómina azul no obedece a ninguna contradicción con la dirección ni jugador alguno, sino a proyectos personales del jardinero, tal y como la solicitó también el mayabequense Ernesto Molinet.
Quizás, en la próxima edición del torneo, las primeras invitaciones deberían ser para los medallistas nacionales, en función de convertir esta Copa en la antesala más fuerte y esperada de nuestro pasatiempo nacional. Es tan solo una idea para un certamen que, por suerte, ha perdurado en el tiempo.