Demasiado picantes resultaron los “primeros platos” servidos a nuestra selección en el Campeonato Mundial Sub 23 de Voleibol (f), que reúne a 12 equipos en las ciudades aztecas de Tijuana y Mexicali.
En la jornada inaugural, celebrada el sábado último, las muchachas de Juan Carlos Gala cedieron en cuatro sets (26-28, 27-25, 15-25, 21-25) ante el conjunto de Brasil, distinguido por el accionar de su capitana Ellen Braga (23 pts.) y por la calidad del bloqueo, efectivo 17 veces.
El plantel cubano alineó con la opuesta Melissa Vargas (9 pts.), la pasadora Beatriz Vilches (2), las centrales Rosanna Giel (14) y Alena Rojas (12), las auxiliares Jennifer Álvarez (16) y Sulian Matienzo (3), y la líbero Emily Borrell. Daymara Lescay (11) reemplazó varias veces a Matienzo hasta salir como titular en la última manga.
De acuerdo con las estadísticas, la posibilidad de lograr la victoria se esfumó debido a la elevada cifra de errores no forzados (33 por 21 las sudamericanas), así como por las acostumbradas imprecisiones en la recepción (22,58 %) y el acomodo (2,25 por set).
La segunda presentación de las nuestras en este grupo B, frente a Estados Unidos, concluyó al cierre de esta edición con derrota en períodos de 25-20, 25-19 y 25-21. Las próximas apariciones del elenco serán ante China (lunes), Kenya (martes) y Alemania (miércoles), y deberán saldarse con éxito para mantener opciones de llegar a la fase semifinal.
En cuanto a la organización del certamen, sorprendió el anuncio sabatino de que el Comité de Control había decidido no aplicar las reglas de los sets a 21 puntos y la de 15 segundos entre saques, debido a la retroalimentación obtenida desde “numerosas partes”. Tales innovaciones, sin embargo, sí se están aplicando en la versión masculina de este evento, iniciado ayer en Brasil.