En el acto por el XX aniversario de su caída en combate, efectuado el 8 de octubre de 1987 en la ciudad de Pinar del Río, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz afirmó: “Que el pensamiento económico del Che se conozca. Se conozca aquí. Se conozca en el mundo: en el mundo capitalista desarrollado, en el Tercer Mundo y en el mundo socialista”.
Y agregó: “Si conociéramos el pensamiento económico del Che, estaríamos mil veces más alertas”.
La aplicación de sus ideas no puede circunscribirse solamente a paneles o conferencias en congresos y encuentros de especialistas o trabajadores; tiene que estar, sobre todo, de manera directa en las fábricas, cooperativas, granjas, empresas y academias, y constituir tema permanente de estudio y valoración, máxime en el momento en el cual nos encontramos, signado por el empeño estratégico de transformar la economía y fortalecerla.
Los estudios y análisis que realizó dejaron —quizás sin él pretenderlo— un amplio caudal de principios y definiciones que deben ser considerados siempre que de economía se trate.
En esa propia jornada de aniversario Fidel planteó: “Che tenía ideas verdaderamente profundas, valientes, audaces, que se apartaban de muchos caminos trillados. Y añadió: “Algunas ideas del Che en cierto momento fueron mal interpretadas e incluso mal aplicadas. Ciertamente nunca se intentó llevarlas seriamente a la práctica, y en determinado momento se fueron imponiendo ideas que eran diametralmente opuestas al pensamiento económico del Che”.
En el VII Congreso de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba (Anec) y de manera específica en el panel de homenaje a Carlos Rafael Rodríguez y Ernesto Guevara, el doctor Joaquín Infante Ugarte, uno de los especialistas más prestigiosos de esa ciencia en la actualidad, consideró al Che como “un economista impresionante”, a lo cual pudiera agregársele: e imprescindible.
La Editorial de Ciencias Sociales editó en 1988 el libro titulado Ernesto Che Guevara. Temas económicos, en el que se presenta una amplia compilación de parte importante de sus escritos, discursos y conferencias sobre múltiples temas.
Es un volumen indispensable —a mi modo de ver— para quienes estén vinculados de alguna forma al quehacer económico o a estudios afines, sin dejar de considerar a los dirigentes administrativos y también sindicales, pues estos últimos encontrarán el texto íntegro de un discurso dirigido a la clase obrera, pronunciado el 14 de junio de 1960 y en el que definió, con claridad meridiana, el papel del líder dentro de la masa trabajadora.
En esa intervención el Che subrayó: “(…) Nuestro camino es difícil, y nuestra fuerza es la unión de los trabajadores, de los campesinos, de todas nuestras clases necesitadas, que tienen necesidad de marchar hacia el futuro”.
La obra, en su conjunto, reseña sus apreciaciones sobre asuntos muy importantes y de tanta actualidad como el salario, el ahorro, las posibilidades económicas de Cuba, las inventivas y su influencia decisiva en el funcionamiento de los talleres y las fábricas, la significación de los estudios técnicos, la calidad, la productividad del trabajo, el papel de las mujeres en el desarrollo económico y social del país y la planificación, así como la aplicación de la ciencia y la técnica, el control de los costos, los contratos, el sistema presupuestario y la disciplina financiera, entre otros muchos.
Resultaría válida una nueva edición de ese texto y su presentación en círculos relacionados con los asuntos económicos, quizás a través de las secciones de base de la Anec. De esa forma llegaría a las más diversas entidades y podría convertirse en material de consulta y estudio permanente, no solo por parte de los especialistas, sino también por todos los que estén interesados.
No debemos olvidar la exhortación hecha por el Comandante en Jefe a elevar la cultura económica de los trabajadores, acrecentada últimamente por el análisis en los colectivos laborales del plan anual de la economía y el presupuesto y de documentos de tanto peso, como el Anteproyecto de Ley Código de Trabajo.
En las palabras preliminares de otro libro ineludible: Apuntes críticos a la Economía Política, el doctor Osvaldo Martínez, director del Centro de Estudios de la Economía Mundial, aseveró: “Si estamos aquí, Comandante Guevara, ha sido también porque tu ejemplo caló bien adentro en el pueblo y eres parte de la coraza con que protegemos nuestro derecho a construir el socialismo después que otros capitularon”.