Danza Fragmentada celebra un aniversario “cerrado”: 20 años defendiendo un repertorio que fusiona los más contemporáneos lenguajes de la danza contemporánea con el extraordinario acervo folclórico de su ciudad, Guantánamo.
La fiesta de cumpleaños tendrá lugar el próximo mes, precisamente en Guantánamo, una provincia que cuenta con uno de los más sólidos movimientos de la danza en Cuba. Pero este mes la agrupación inició una gira nacional que ya los llevó a Pinar del Río y que este fin de semana hace escala en el capitalino teatro Mella.
Bajo la dirección del maestro Ladislao Navarro (que por cierto, también celebra sus 35 años de trabajo artístico), la compañía presentará un programa integrado por dos piezas: Esquizofrenia y A ras de vuelo.
Se trata de coreografías que aúnan lo más distintivo del trabajo de la compañía con nuevas propuestas creativas. Habrá funciones el viernes y el sábado (8:30 p.m.) y el domingo (5:00 p.m.).
Dos décadas danzando
Los principales problemas del hombre contemporáneo han estado en la mira de Ladislao Navarro y su compañía desde la fundación. Se trata de asumir desde la danza los retos y obstáculos del individuo en la búsqueda de su realización.
Pero la manera de asumir ese contenido ha sido disímil. Una de las características de la agrupación siempre ha sido la coexistencia de técnicas y estilos que pudieran parecer hasta contradictorios, pero que se amalgaman en las coreografías puntuales.
Danza Fragmentada cuenta ahora con 14 bailarines, formados en su mayoría por el sistema de escuelas de arte. Estos intérpretes incorporan también un rol pedagógico, porque la sede de la compañía, en la ciudad de Guantánamo, es un centro de promoción de arte en la comunidad.
El repertorio histórico de la compañía cuenta con más de 60 obras, algunas de ellas premiadas en concursos nacionales. El conjunto se ha presentado en los principales teatros de Cuba. Ha colaborado con agrupaciones de Italia, Francia y Venezuela.