La seguridad anestésica fue el tema central del X Congreso de anestesiología, reanimación y dolor, que se clausuró este viernes, en el Hotel Nacional, de La Habana.
El evento, que se convoca cada dos años, tiene por objetivo capacitar e informar a los profesionales de esta especialidad médica sobre las novedades y adelantos científicos para que cada día puedan enfrentar mejor la atención a los pacientes.
También pretende actualizar sobre temas de interés en el quehacer cotidiano del anestesiólogo y dentro de ello, lo más avanzado en el campo de anestesia, la pediátrica, obstétrica, neuroanestesia, cirugía cardiotorácica, cirugía de mínimo acceso, oncológica, geriatría, y en el paciente con trauma, así como aspectos de la reanimación cardiopulmonar y cerebral, de la ventilación mecánica, sobre anestesia general endovenosa total (TIVA), y la responsabilidad ética y médico-legal del anestesiólogo.
Igualmente, asuntos novedosos en el estudio y tratamiento del dolor, informó la doctora Idoris Cordero Escobar, presidenta del comité organizador.
Las temáticas abordadas fueron muy diversas y contaron con la presencia de profesionales de varios países quienes trajeron sus conocimientos y experiencias a Cuba.
Un punto que atrajo la atención de los participantes fue el referido al dolor crónico. El doctor Jorge Yera Nadal se refirió a los seis fármacos recomendados para su empleo en el tratamiento de dicha dolencia, ya que las transnacionales farmacéuticas han invadido el mercado sin tener en cuenta los daños colaterales que pueden causar en el paciente.
“Saber escoger el fármaco ideal dentro del grupo de los opiodes, depende del conocimiento que tenga el médico sobre sus propiedades, forma de metabolizarlos o cómo degenera. De la certeza que se tenga en cuál es el más idóneo depende que el mismo ocasione menos daños colaterales al enfermo.
“Todos estos fármacos tienen beneficios e inconveniencias, pero no son tan malos porque su producto original, que es el opio, se usa desde el año 3 400 antes de Cristo”, dijo el especialista.
En el evento se conoció sobre un nuevo fármaco, pariente del Tramadol, traído por un delegado italiano, que promete mucho en dolores del tipo ligero, moderado y severo.
Otro tema destacó la utilización de los antidepresivos y los anticonvulcionantes en el manejo de dolores neuropáticos o del cáncer, que se emplean en grandes cantidades en nuestro país diariamente.
Una sesión del congreso se dedicó al dolor de espaldas, una disfunción que se está tratando comúnmente y se refiere al mal funcionamiento de la musculatura. Puede producirse por las posturas que adoptan las personas o males fisiológicos, afirmó Yera Nadal.
La última sesión del congreso, este viernes, versó sobre las técnicas intervencionistas, el dolor en la mujer, actualización en trauma, neuroanestesia, y anestesia general endovenosa total (TIVA).
Espacio muy especial mereció el dedicado a la seguridad y legalidad en Anestesiología, que abordó temáticas referidas a la calidad, la responsabilidad profesional del anestesiólogo y la seguridad del quirófano.
