Los aficionados a la ornitología en Cuba fundan cooperativas en todo el país, como parte del proceso de la actualización del modelo económico, cuyos lineamientos fueron aprobados en el VI Congreso del Partido Comunista y apuntan a hacer sostenible y próspero el socialismo.
Las 16 provincias y el municipio especial Isla de la Juventud cuentan con esta forma de producción y el fin de semana próximo quedará constituida la instancia nacional, todas con el objetivo de facilitar el acceso de sus producciones al mercado internacional.
En la nororiental provincia de Las Tunas, a ellos les correspondió fundar la primera cooperativa no agropecuaria de este territorio y sus 46 asociados califican el acto como una novedosa e interesante propuesta que les abre prometedores horizontes a su interesante afición.
Lo afirma Julio César Capelli, presidente de la entidad productiva, cuyo objeto social, según establece la Resolución 593 del 2013 firmada por el Ministro de la Agricultura de Cuba, incluye el acopio y comercialización de aves ornamentales; así como la producción y venta de alimentos, jaulas, medicamentos, utensilios y accesorios que garantizan la sostenibilidad de esta práctica.
El mismo cuerpo legal ampara a la organización en sus gestiones de ventas de literatura y de otros medios imprescindibles para el desarrollo ornitológico y la faculta a prestaciones de servicios veterinarios y de asesoría técnica en lo referente a este tipo de actividad.
Capelli asegura que la cooperativa dispone de alrededor de mil 500 parejas de diferentes especies factibles a la exportación, aunque, aclara, “los demás miembros de la filial, no incorporados a la cooperativa porque hay respeto a la voluntariedad, pueden tributar al empeño de crecer en el comercio con el exterior.’’
Comoquiera que los socios proceden en su totalidad de la filial tunera de la Asociación Cubana de Ornitología, fundada aquí en el año 1989, la experiencia es otro ingrediente que aliña las expectativas del colectivo.