La lucha cubana encarará el venidero campeonato mundial (Hungría, 16 al 22 de septiembre) tras cumplir una etapa preparatoria de escaso roce internacional, lo cual pudiera comprometer los resultados en el magno evento.
El Torneo Internacional Cerro Pelado-Granma, disputado en La Habana a inicios de año, y el posterior certamen panamericano celebrado en Panamá, resumen el trayecto internacional de una especialidad tradicionalmente aportadora de medallas mundiales para el país.
A esta situación se suma la relativa renovación de los planteles nacionales y la ausencia esta vez, motivada por un necesario descanso, del cuádruple monarca mundial y dos veces olímpico Mijaín López.
La participación de los equipos clásico, libre y femenino ocurrirá en un momento de más presión todavía, luego de que los elencos de judo y taekwondo registraran recientemente actuaciones destacadas en sus respectivos campeonatos del orbe.
La dotación grecorromana, esta vez comandada por el entrenador Carlos Ulacia, asistirá con cuatro gladiadores, a decir Ismael Borrero (60 kg), Gilberto Piquet (84), Pedro Isaac Mulén (66) y Yasmany Lugo (96).
Borrero ha triunfado dos veces en los certámenes panamericanos, Piquet tiene el mérito de haber derrotado al internacional Pablo Shorey, mientras que Lugo acumula un oro mundial juvenil y dos triunfos a nivel continental. Isaac es, sin duda, el principal exponente del equipo, por sus dos medallas mundiales alcanzadas en el pasado cuatrienio.
En cuanto a la presencia de Ulacia en lugar de Pedro Val, la comisión nacional explicó que el destacado jefe técnico cubano enfrenta dificultades personales que sugirieron su ausencia en esta oportunidad.
Respecto al elenco del estilo libre, a las órdenes de Julio Mendieta, lo integran Libán López (66 kg), Alejandro Valdés (60), Yunieski Blanco (74) y Reineris Sala (84), todos con participaciones anteriores en lides de este tipo.
No obstante, las principales cartas de triunfo son Libán, bronce olímpico y mundial, y Sala, quien también sabe lo que es subir al podio mundial.
La selección femenina, a cargo de Elio Garraway, tendrá la oportunidad de asistir con tres chicas, la mayor cantidad desde el debut en estas justas, ocurrido en el año 2009, cuando asistió a Herning Yamilka del Valle en los 59 kg.
Esta vez el equipo está encabezado por las campeonas panamericanas Katherine Vidiaux (63 kg) y Liset Echevarría (72 kg), así como por la campeona nacional de los 59 kg Yakelín Stornell. Se trata de luchadoras de nivel y con posibilidades reales de llegar al podio, lo que significaría mejorar el punto más alto al que se ha llegado hasta ahora: el quinto lugar de Vidiaux en Moscú 2010 y el octavo de ella misma en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
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