Después de tanta espera amaneció finalmente una medalla para Cuba en campeonatos mundiales de remo, gracias a Ángel Fournier en el single abierto, quien terminó con una plata histórica este domingo en Chungju, Sudcorea, que lo encumbra como el mejor remero de todos los tiempos en nuestro país.
La regata resultó emocionante y difícil para el antillano, pues a los 500 metros iba último, pero poco a poco fue levantando su ritmo hasta el cuarto puesto en la mitad del trayecto, tercero a solo 500 metros de la final y segundo en la raya de sentencia (6:48.91), a solo tres segundos del campeón mundial del 2010 y doble subcampeón olímpico, el checo Ondrej Synek (6:45.24).
El campeón de los Juegos Panamericanos pasó un examen que alcanza valores de excelencia, pues además del checo en la final derrotó a remeros de notable calidad internacional como el veterano alemán Marcel Hacker, bronce ahora, pero recurrente en los podios con un título del orbe en el 2002 y bronce en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
Como si fuera Founier también dejó sin medallas además al inglés Alan Campbell, bronce olímpico en Londres y segundo del planeta en el 2009, así como al holandés Roel Braas y al lituano Mindaugas Griskonis, medallistas en lides europeas, donde se concentran los mejores remeros del mundo.
Sin embargo, a todo lo anterior pudiéramos agregar que fue la reivindicación definitiva de Fournier después de haber sido sexto en el anterior certamen universal (2011) y terminar en el séptimo escaño olímpico en Londres. Sus bronces en Copas del mundo habían adelantado sus reales posibilidades, pero la concreción en el lago sudcoreano ratificó lo que venían pronosticando sus entrenadores y muchos especialistas del deporte.
?Es un gran honor ser el primer medallista del remo cubano en la historia. Siempre soñé con este momento y solo pienso en mi familia, en mis entrenadores en todos los que contribuyeron a esta medalla?, declaró al sitio oficial del evento el guantanamero.
Cuba había estado en varias finales mundiales, pero nunca había podido ascender al podio, con los mejores avales en dobles sculls y el doble varonil, peso ligero. Sin embargo, esta plata de Fournier pone fin a una espera que supera las cuatro décadas y que ennoblece a la familia del remo, una de las más sacrificadas y esforzadas dentro del deporte cubano.
El resto de la actuación cubana en este mundial de remo se completó con el onceno puesto del binomio, Adrián Oquendo-Janier Concepción en el doble scull y el lugar quince del cuatro sin timonel, peso ligero, en la rama varonil.
Cuba terminó en la posición 21 en la tabla de medallas, dominada por Italia (3-2-3), Australia (3-2-1) y Gran Bretaña (3-0-5)
