La tercera jornada competitiva del 29 campeonato mundial de judo que tiene por sede a Río de Janeiro, Brasil, dejó buenas demostraciones para nuestros dos representantes: Anailys Dorvigny (57) y Magdiel Estrada (73 kg), a pesar de no poder entrar en el cuadro de medallistas, algo que pocos debutantes logran a este nivel.
Dorvigny quedó bye en la primera ronda y abrió entonces con victoria por Wazari a la austríaca Tina Zeltner, pero acto seguido, cayó por esa misma vía contra la japonesa Anzu Yamamoto. Fue la tercera derrota de una judoca cubana ante rivales niponas en este mundial, lo cual abre las preocupaciones para la dirección técnica de nuestra selección.
En esta división llegó la primera dorada para las anfitrionas, por intermedio de Rafaela Silva, quien venció en la final a otra figura de nuestro continente, la estadunidense Marti Malloy. Con este título, las anfitrionas pasaron a comandar la tabla de medallas en ese sexo con una presea de cada color.
En el caso de Magdiel, de solo 19 años y aspirante a participar en el mundial juvenil de Eslovenia, su desempeño convenció tras los éxitos contra el canadiense Alexis Morin-Martel (descalificación) y por shido al colombiano Luis Galindo.
Ya en la tercera presentación, su rival de turno subió de categoría, pues el holandés Dex Elmont, Dex, doble subtitular del orbe (2010 y 2011) no le permitió grandes libertades, aunque la decisión final del combate llevó por tres amonestaciones al joven cubano.
Este jueves puede caer la primera presea de Cuba a través de Maricet Espinosa en los 63 kilos, en tanto Jorge Martínez sluchará por avanzar en los 81 kilos.
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