En el territorio villaclareño, afortunadamente, se logró establecer una “ruta” para darles seguimiento a las inquietudes que incluye despachos, análisis, exigencia y discusiones con administrativos, representantes gubernamentales, de los ministerios y otras instancias.
“Durante el primer semestre del 2013 el 80,4 % de las demandas realizadas durante ese proceso han tenido solución. Asimismo se conoce que 42 asuntos no la tendrán, pero se decidió incluir 41 en el plan del 2014 y uno en el del 2015”, declaró Masiel Villarreal, miembro del secretariado provincial de la organización obrera.
Según explicó, algunos pendientes pueden tener respuesta en el próximo semestre, como el aseguramiento de las materias primas y el mantenimiento de la tecnología instalada en determinados centros, tramitar preocupaciones sobre los valores y precios de equipos e insumos que afectan los cálculos de los proyectos, de acuerdo a lo que establece la política inversionista, la mala calidad de la ropa y el calzado, fundamentalmente en el sector azucarero, inconformidad con el contrato de los trabajadores cíclicos, así como la aplicación de sistemas de pago con regulaciones de ministerios y empresas nacionales.
Fueron solucionados carretillas hidráulicas, encerados para protección de equipos, linternas para los trabajadores de los Cupet, piezas de repuesto para máquinas especiales, medios de protección, asimismo algunas materias primas e insumos para el turismo y la industria.
“Cada planteamiento tiene un análisis sistemático, diagnóstico y tramitación. Se conoce también el nivel de cada respuesta o solución. Por ejemplo, 227 demandas son de competencia nacional, de las cuales 104 han tenido un procedimiento positivo, que significa el 45,8 por ciento. A las instancias provinciales les competen 529 quejas, se han resuelto 397, lo que representa el 75 por ciento. En los municipios puede solventarse la mayor parte de las peticiones (mil 67), se han respondido positivamente 868, para el 81,55 %”, precisó.
No obstante, la realidad indica que los sindicatos deben fortalecer su sistema de trabajo para la atención y seguimiento de los acuerdos, pues muchas de las acciones parten de la secretaría de Asuntos Económicos y de los despachos establecidos por la secretaria general de la CTC en la provincia con directivos de organismos.
Este no debe ser un proceso que concluya en las asambleas del plan y el presupuesto sino que debe continuar en las de afiliados, escenario ideal para exponer las quejas y preocupaciones obreras, así se perfecciona el funcionamiento sindical y la representatividad del trabajador.
Ello implica que los ejecutivos sindicales preparen adecuadamente los encuentros para propiciar y debatir a partir de la participación colectiva, las respuestas, siempre que sean posibles.
Además, se mantiene un control sistemático de las demandas de los trabajadores que redundan en mayor eficiencia y más productividad.