El carácter de los retos para los comunicadores de esta época es ante todo profesional, ético y de compromiso, pues debemos contribuir a hacer de la comunicación social un derecho ciudadano universal, expresó Rosa María Pérez, presidenta de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales (ACCS), al dejar inaugurado este miércoles el Primer Festival Internacional de Comunicación Social.
El evento, que se desarrolla en el Hotel Nacional de Cuba hasta el viernes, cuenta con la asistencia de cerca de 300 delegados de varios países.
En su intervención, Rosa María Pérez se refirió a los retos y desafíos de la comunicación en el panorama nacional e internacional y dijo que en medio del escenario mundial que hoy se vive, Cuba muestra de forma concreta su comprensión sobre los temas de la comunicación.
De igual forma, la presidenta afirmó que mucho queda por hacer para lograr que los organismos de la Administración Central del Estado, los órganos del Poder Popular, las entidades, las comunidades y los medios de comunicación tengan no solo una estructura, si no al menos una persona ocupándose de las funciones de la comunicación social.
Reconoció que existe un potencial profesional listo para favorecer una cultura comunicacional para el ejercicio de valores propios, de hábitos y normas de vida que identifiquen a los cubanos y las cubanas de hoy.
Este primer Festival pretende dejar limpio el camino para la aplicación de las disciplinas de la comunicación. Asimismo aspira a favorecer que los mensajes y el uso de los soportes comunicativos propicien que las relaciones en las instituciones y en la sociedad sean más armónicas, más íntegras y más comprometidas con Cuba y las buenas causas del mundo.
