Por Fernando Rodríguez Sosa
La llamada estrofa nacional, la décima, cuenta con numerosos cultivadores a lo largo de la geografía insular. Son creadores, tanto hombres como mujeres, que, a través de la tradicional composición, cantan a temas tan diversos como el amor, la naturaleza, la patria, el sentimiento…
En el panorama de la décima cubana contemporánea, sobresale la obra de Nieves Rodríguez (San Juan y Martínez, Pinar del Río, 1934). Dueña de un cuidado discurso, su ejercicio lírico se sustenta, fundamentalmente, en el rescate y renovación de la antigua estructura poética.
De la luz y otras provocaciones (Editorial Sanlope, Colección Montaraz, 80 pp) y Canto de amor a Pinar del Río (Editorial Cauce, Ediciones Almargen, Colección La Fijeza, 84 pp) son dos decimarios de esta escritora, en que es fácil comprobar la riqueza, diversidad y trascendencia logradas durante varias décadas de creación lírica.
En De la luz y otras provocaciones se reúnen, en tres secciones, medio centenar de textos que –en palabras de sus editores— son expresión de una “poesía de códigos ya establecidos en el estilo de esta autora, un cuidadoso manejo en la irregularidad de la forma dentro de una síntesis precisa para que nada resulte gratuito”.
Las décimas incluidas en el cuaderno son inteligentemente concebidas a partir de la recreación de la palabra luz, que sirve de hilo conductor de toda la colección. “Décima por un pie forzado de Adolfo Martí, en Limonar” es uno de esos textos, inspirado en un verso del también reconocido decimista, con quien la autora, por décadas, compartiría la vida.
¿Morir por dentro es vivir
con una luz encendida
y que de un soplo la vida
la apague?
¿Hacia dónde ir
sin esa luz?
¿Resistir a oscuras?
Voy, salgo, entro,
busco, indago
y no la encuentro.
La sombra de luz que soy
va anunciándome que hoy
vivir
es morir por dentro.
Como un hermoso tributo a la tierra natal, puede calificarse Canto de amor a Pinar del Río. Desde el recuerdo, la nostalgia, la memoria, Nieves Rodríguez propone, a través de la décima, un recorrido por la geografía –física, histórica, sentimental— de la más occidental de las provincias de la isla.
Son textos sencillos, espontáneos, evocadores, como éste que recuerda una de las acciones del Titán de Bronce:
MARIEL,
de ti hasta Majana,
burló la trocha Maceo,
acero y relampagueo
de la libertad cubana.
Silenciosa la sabana
los protegió siempre fiel
a sus mambises y a él
que ha eternizado tu nombre
y tu bahía,
ese nombre,
te inmortalizó,
Mariel.
“Bien ha hecho la autora en expresarse en décimas –escribe Jesús Orta Ruiz (Indio Naborí), al presentar este cuaderno—, porque así cantan los pinareños sus alegrías y tristezas. La cantora no describe el paisaje, sino como los poetas románticos, hace hablar las cosas y conversa con ellas”.
Otros libros conforman la bibliografía de Nieves Rodríguez, entre ellos aparecen los decimarios Días de naipes, reconocido con los Premios 26 de Julio de las FAR y Pinos Nuevos; Libro de los pececitos, que recibió el Premio La Edad de Oro; Cartas eróticas de ETN, y Cantares.
Leer décimas es como recibir un soplo de aire fresco. Nieves Rodríguez lo sabe, está convencida de ello. De ahí que, con sus cuadernos De la luz y otras provocaciones y Canto de amor a Pinar del Río, proponga a los lectores descubrir esas realidades, esos sortilegios, esos encantos, esas esperanzas, que encierra la vida misma.
