No pudo estar junto a su pueblo el Primero de Mayo, pero desde Cuba el Presidente Hugo Chávez expresó el pasado año su admiración por la formidable respuesta de los venezolanos a la convocatoria del Primero de Mayo.
Así lo expresó en su cuenta de twiter: «Tremenda Marcha, Compadre! Bueno, que nadie se vaya a equivocar con nuestro Pueblo y nuestros trabajadores! Viva la Independencia Nacional!»
Y poco después se podía leer en @chavezcandanga: «Esa Plaza O’Leary desbordada de Amor y de Pueblo! Estoy allá con Uds., Trabajadores y Trabajadoras de la Patria! Hasta la Victoria Siempre!».
Y es que como él mismo expresó un año atrás, la Revolución bolivariana había transformado el Primero de Mayo en un día de júbilo, de fiesta del proletariado nacional.
Una de las muchas razones para que los venezolanos celebren con alegría esta fecha la acaba de reportar Telesur: La Gran Misión Vivienda Venezuela cumple dos años con casi 374 mil hogares construidos.
Es el cumplimiento de lo anunciado por Chávez cuando lanzó esta misión: «el drama de la vivienda no tiene solución en el capitalismo. Aquí lo vamos a solucionar con socialismo».
En cada conquista de la Revolución venezolana está la huella de su querido presidente: en la erradicación del analfabetismo; la alta escolarización lograda en la enseñanza primaria que supera el 90%; los positivos resultados de las Misiones Robinson II para llevar a la población al nivel secundario, y las Misiones Ribas y Sucre que permitieron a decenas de miles de jóvenes acceder a los estudios universitarios.
Los venezolanos disfrutan hoy de acceso gratuito a la atención médica, y de nuevos centros para prestar estos servicios, la Misión Barrio Adentro, ha permitido salvar a más de un millón de vidas; se ha reducido la mortalidad infantil de 19,1 por mil en 1999 a un 10 por mil en 2012, y elevado la elevación de la esperanza de vida hasta 74,3 años.
El pueblo tiene posibilidades de una mejor alimentación a través de una Misión dedicada a ese fin que creó la cadena de distribución MERCAL, con precios subvencionados; la tasa de desempleo se redujo de un 15,2% en 1998 a un 6,4% en 2012, con la creación de más de 4 millones de ocupaciones; se elevó el salario mínimo; está garantizada la protección a los ancianos, a las mujeres sin recursos y a los discapacitados…
Son, entre otros muchos, resultados concretos de una obra que ha permitido que Venezuela haya entrado en la categoría de las naciones con el Índice de Desarrollo Humano elevado.
Y las transformaciones emprendidas por Chávez siguen adelante bajo la presidencia de Maduro, por eso la marcha de hoy es un tributo al desaparecido líder bolivariano, la ratificación del pueblo venezolano, fiel a su legado de optimismo, de aquella expresión contenida en multitud de carteles enarbolados por manos de hombres y mujeres laboriosos el pasado año: “Palante Comandante” y la reiteración de su mensaje aquel Primero de Mayo : “que nadie se vaya a equivocar con nuestro Pueblo y nuestros trabajadores”.
