Resulta una tradición que a las siete de la mañana esta provincia inicie en el país las marchas en ocasión de la fiesta del proletariado mundial, de ahí que desde horas bien tempranas de la madrugada los trabajadores y sus familiares comiencen a concentrarse, ataviados con prendas rojas, azules o blancas, en alusión a los colores de la enseña nacional.
En cada uno de los nueve municipios, principalmente en la cabecera provincial, las iniciativas que le aportan colorido y alegría al desfile desbordan por doquier, destacando los piquetes musicales que se forman para la ocasión, los cuales desgranan toques a ritmo de conga, interpretación que identifica a esa región del país.
Los bloques que conforman los distintos sindicatos también exhiben banderolas, pancartas, gigantografías, flores, globos y otros elementos patrióticos y ornamentales que le dan un singular toque a la marcha.
Este año las motivaciones para repetir todo este derroche de entusiasmo se hacen muy especiales para Santiago de Cuba, en tanto la Central de Trabajadores de Cuba, en el contexto de su XX Congreso, dedica este Primero de Mayo al aniversario 160 del natalicio de José Martí y al 60 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.
La Plaza de la Revolución Antonio Maceo, sede del desfile provincial, será expresión de júbilo de los trabajadores estatales y no estatales, campesinos, intelectuales, amas de casa y estudiantes, quienes ratificarán con su presencia multitudinaria la voluntad de estar unidos por un socialismo próspero y sostenible.