Los trabajadores de la poligrafía cubana fabricaron de enero a la fecha poco más de 20 millones de libretas y unos 4 millones de ejemplares de libros para los estudiantes que este 2 de septiembre se incorporen a las aulas para iniciar el curso 2013-2014.
Ambas cifras garantizan el feliz inicio del período lectivo y constituyen la primera parte del compromiso anual de la industria, que continuará la producción de ambos rubros hasta completar a fines de año los 38,4 millones de libretas y 7,6 millones de libros.
A ello se une la confección de más de 10 millones de cuadernos y registros destinados a este curso escolar, fundamentalmente para la enseñanza primaria.
Alberto Fiol, especialista de la Integración Poligráfica, informó que ese programa se ejecutó, principalmente, en los poligráficos de Guantánamo, Palma Soriano, Holguín, Villa Clara y La Habana, aunque en el caso de las libretas se vieron inmersos los centros fabriles de todas las provincias.
Es de destacar que con los altos niveles alcanzados, y por tercera ocasión consecutiva, el país no tiene que importar libretas para su sistema educacional, un verdadero logro, si se tiene en cuenta que en años anteriores llegaban de China casi 20 millones de unidades.
A pesar de las dificultades por las que atraviesa la economía nacional, en este 2013 el país pudo garantizar las materias primas imprescindibles para satisfacer lo planificado, y han recibido el apoyo de la Unión de Camiones (UDECAM) en la transportación de las producciones terminadas, lo que coadyuvó a la llegada temprana de los materiales a los distintos territorios.
Es de estacar que los poco más de medio millón de libros de Historia, Pasajes de la Guerra y otros, entregados a los estudiantes graduados en julio pasado forman parte también del compromiso productivo de este año para quienes laboran en la poligrafía de la isla.